Montreal, CAN.- Nuevas regulaciones sobre el uso de drones han entrado en vigor en Canadá, con la aprobación de su Gobierno. El sobrevuelo en las proximidades de los aeropuertos y escenarios de emergencias son logicamente las primeras restricciones, pero hay mucho más en esta siempre complicada regulación por cuestiones tanto de Security como de Safety.
El Ministro de Transportes de Canadá, Mrc Garneau, reconociendo que animan todas las posibilidades de las no tripuladas, desde el punto de vista económico y técnico, acto seguido ponía el acento en la necesidad de introducir las medidas de seguridad necesarias. Se comienza por el registro de los drones, y que sus operadores de los de gran tamaño tengan certificaciones, limitando quiénes pueden operarlos, dónde y qué pueden transportar.
Por ejemplo los drones según la nueva regulación canadiense no pueden transportar seres vivos, aunque algunos con permisos especiales sí puedan hacerlo con explosivos, armas o municiones.
La edad mínima para los propietarios que habrán de estar registrados es de 14 años, ser ciudadanos o residentes permanentes en Canadá, mientras se prohibe la ingesta de alcohol o drogas hasta doce horas antes de volarlos.
Las medidas entrarán en vigor a partir del 1 de junio y su aplicación será para drones entre 250grs. y 25 kilogramos. El Ministro de Transportes ha recordado que cuando se pilota un drone se adquieren tambien las responsabilidades de un piloto, y que se es piloto al operar un drone.
Estas regulaciones prohíben operarlos «de forma negligente o temeraria o que ponga en peligro o probablemente ponga en peligro la seguridad aérea y la seguridad de cualquier persona».
Garneau ha destacado que aquellas personas que violen estas medidas podrían hacer frente a multas de hasta 3.000 dólares canadienses (unos 1.965 euros), mientras que en el caso de las compañías la cifra podría ascender hasta los 25.000 dólares canadienses (cerca de 16.385 euros).
Además, en caso de que las autoridades considere que una persona está alterando el tráfico aéreo de forma deliberada con el uso de estos aparatos, el responsable podría ser condenado a pena de cárcel.
La aprobación de las regulaciones llegaba un día después de que el aeropuerto londinense de Heathrow, el de más tráfico de Reino Unido, suspendiera durante una hora los despegues por la supuesta presencia de drones en la zona.
Apenas dos semanas antes, el aeropuerto de Gatwick, también en Londres, quedó sumido en el caos durante varios días debido a la presencia de drones en las proximidades de la pista, lo que provocó su cierre en los días previos a Navidad.
