Once años después del accidente de la aerolínea Lapa, que se cobró la vida de 65 personas en agosto de 1999, la Justicia dejó en libertad a los ocho acusados de la mayor catástrofe aérea registrada en Argentina. Familiares de las víctimas mortales y supervivientes protestaron ayer acaloradamente ante un fallo que calificaron de "vergüenza nacional".
Mataron otra vez a nuestros hijos", lamentaron. El Tribunal Oral Federal número 4 absolvió a la cúpula de la compañía, así como al Comodoro Damián Peterson y al director del Instituto de Medicina Aeronaútica y Espacial, Diego Lentino. Estos últimos estaban procesados por "incumplimiento de los deberes de funcionario público" pero su delito, de acuerdo a dos de los tres jueces de la Cámara, se consideró prescrito.
El resto de los imputados recibió condenas que podrán cumplir fuera de la cárcel. Gustavo Deutsch, presidente de Lapa, y Ronaldo Boyd, vicepresidente, también fueron absueltos lo que provocó un auténtico escándalo en la sala donde debió suspenderse la lectura de la sentencia por espacio de veinte minutos. Valerio Diehl y Gabriel Borsani, siguientes en el escalafón de la empresa, fueron condenados, respectivamente, a tres años de prisión en suspenso.
Esto es, en libertad. El 31 de agosto de 1999 un avión de la compañía Lapa, popular por ofrecer tarifas a muy bajo precio, se salió de la pista mientras intentaba el despegue. La nave se estrelló fuera del recinto del aeropuerto nacional Jorge Newberry, más conocido como Aeroparque, y atravesó una de las principales arterias de la ciudad envuelta en llamas. El accidente dio pie a la película "Whisky, Romeo, Zulú", del ex piloto de la compañía y realizador Enrique Piñeyro. En la cinta se denuncia la falta de medidas de seguridad, la corrupción de la Fuerza Aérea, los abusos y el incumplimiento de la normativa vigente por parte de Lapa.
