Miguel Gutiérrez / Aviación Digitial, Sp. – El pasado sábado un bólido artificial, procedente de Francia, sobrevoló la península ibérica pasando por Cataluña y por Baleares para ir a parar al Mediterráneo. Así fue captado por las cámaras volando a 15 kilómetros por segundo:
En un primer momento, la Red de Investigación de Bólidos y Meteoritos (SPMN) del Instituto de Ciencias del Espacio del CSIC aseguró que se trataba de un misil, de una prueba balística. El propio Josep María Trigo, coordinar del SPMN, decía en X: «Sinceramente me pregunto si algún responsable dará explicaciones sobre esta prueba que han hecho sobre nuestras cabezas…¿No deberían anunciarlo?». La misma versión defendía el SPMN.
Sin embargo, esta teoría no fue sostenida durante mucho tiempo. Ya el sábado por la noche el SPMN rectificó. Tanto la cuenta de X del ente como la personal del coordinador borraron sus publicaciones. La nueva versión asegura que se trata de la reentrada de un objeto artificial, restos de un cohete o de un satélite, en la órbita de la Tierra. El veredicto, tras analizar las imágenes y tomar mediciones, es el siguiente:
Cambio de parecer del SPMN
“Los datos preliminares obtenidos hasta el momento nos hacen decantarnos porque el bólido fuese producido por la reentrada de un objeto artificial en órbita terrestre (…) Las reentradas son cada vez más frecuentes (…) Medidas precisas de la velocidad del objeto durante la ablación en la atmósfera nos permitirán dilucidar su naturaleza concreta y, particularmente, si pudiese tratarse de un bólido rozador más inusual”
Josep María Trigo, coordinador del SPMN.
Los investigadores creen que la ausencia de fragmentación y la solidez del meteoroide indica que su naturaleza es metálica. Por ello, se han decantado porque se trate de fragmentos de un cohete o de un satélite que vagaban por el espacio. Descartan, de tal forma, que el SPMN290324ART fuera un misil como se barajó en la mañana del sábado.
4.000 meteoros al año surcan nuestro cielo
Imágenes como esta no son raras. Cada año cientos de toneladas entran en la atmósfera aunque la mayoría de desintegran antes de que las podamos percibir. Se calcula que cerca de 4.000 meteoros surcan nuestro cielo cada año. Algunos son asteroides como el que sobrevoló Toledo y Madrid en julio de 2020:
También vuelve a entrar en la atmósfera chatarra espacial como los restos del sistema de puesta en órbita del satélite USA 321 lanzado en 2022 que fueron avistados en abril de 2023. Por otro lado, los lanzamientos balísticos son una realidad. En enero de este año Francia lanzó un misil que sobrevoló el País Vasco y tuvo que emitir un comunicado para explicar lo sucedido:
