El presidente de Iberia, Antonio Vázquez, ha afirmado que el eispacio aéreo europeo es "de los más ineficientes del mundo", en consumo y vertido de dióxido de carbono a la atmósfera, al no poder volar los aviones en línea recta, como sí ocurre en Estados Unidos. Este hecho supondría un ahorro de 3.600 millones de euros y de 16 millones de toneladas vertidas a la atmósfera.
Este proceso de cielo único europeo, ha manifestado durante su intervención en Málaga en los Encuentros de Economía organizados por el diario ABC, "va muy lento y no sé si lo veremos". Vázquez ha explicado que en Europa hay nudos de control que hacen que la manera de volar sea en zigzag "y que en este momento son artificiales y no estratégicos".
Sin embargo, lo que sí se ha regulado, ha señalado, es el acceso al comercio de emisiones que implicará "que se van a sobrepagar 4.000 millones de euros cuando la racionalización del espacio aéreo supondría ahorrar prácticamente ese dinero".
El combustible para las aerolíneas es, a juicio del también máximo dirigente de IAG, sociedad resultante de la fusión entre Iberia y British Airways; el "ser o no ser de nuestras cuentas de resultados". En este sentido, ha apuntado que en Europa, "también las líneas aéreas tienen un problema de competitividad".
Así, ha explicado que 2010, un año de "profunda crisis", ha sido el mejor de la historia en el agregado de cuentas de resultados de todas las líneas aéreas del mundo que están en el perímetro de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), que son casi 400 compañías; con una facturación de unos 600.000 millones de dólares (454.854 millones de euros).
"Nunca la industria había ganado tanto dinero pero los beneficios fueron de 15.400 millones de dólares (11.675 millones de euros) a nivel agregado, que no llega al 3% de margen", ha indicado, al tiempo que ha añadido que en la última década esta industria ha ganado dinero "en dos o tres años".
El combustible, un condicionante
Vázquez ha reiterado que el precio del combustible "condiciona a tope los resultados de la industria". En este sentido, ha manifestado que en 2011 los beneficios van a estar entre los 5.000 y 6.000 millones mientras que el próximo año serán de 3.000. "En una industria que está creciendo la diferencia es el precio del combustible, que ha crecido prácticamente un 50%", ha apostillado.
Las líneas aéreas europeas, en concreto, están en una situación "muchísimo más dura" que el resto y "no ganarán más de 300 millones todas juntas", mientras que "en 2010, el año récord, las de Europa no han llegado a 1.000 millones".
Vázquez recordó que IAG es el sexto grupo aéreo del mundo en facturación, con 15.000 millones, y un crecimiento "progresivo hasta el en torno de los 1.500 millones en 2015 de beneficios operativos". "Estamos mirando al mundo sin ningún tipo de complejos ni de preocupación, abiertos a la incorporación de nuevos socios porque solo se corre poco", señaló.
Durante su intervención, el presidente de la empresa española ha incidido en la importancia de la consolidación "para ir creando operadores auténticamente globales". No es un sector tan activo en materia de alianzas, ha apuntado, y ha recordado que existen tres. De una de ellas, Oneworld, forma parte Iberia junto a British y American Airlines -en Estados Unidos-.
Vázquez se ha referido también a la sostenibilidad en la aviación y ha defendido los proyectos que se están llevando a cabo para minimizar la emisión de dióxido de carbono a la atmósfera. "Los aviones cada vez pesan menos, los motores consumen menos, se está haciendo un gran esfuerzo tecnológico y técnico", ha precisado, añadiendo que también se está apostando, dentro de la fusión con British, por la utilización y reconversión de residuos orgánicos y se está trabajando con biocombustible de algas.
