Amelia E., Aviaciondigital.- Los primeros acordes del 2021 quedarán marcados en nuestras memorias como los días en que Filomena colapsó y cerró el aeropuerto de Madrid Barajas. Un aeropuerto que se vio superado por la intensa nevada que reveló deficiencias respecto a la entredicha eficacia del Plan de actuación frente a hielo y nieve, un Plan Invernal, que en esta ocasión hizo agua.
Vuelos cancelados, militares al auxilio, planes descoordinados, pilotos espectadores asistiendo inauditos desde la primera fila de su cabina a un espectáculo caótico que se dio lugar en pistas y calles de rodaje, sin olvidar la lenta recuperación que el aeropuerto vivió con la resaca de unos trabajos duros y complejos que aseguraran su reapertura… Será sin duda, un momento histórico más que recordar de estos que estamos viviendo en los últimos años.
Desde el SEPLA se ha realizado una investigación técnica de la situación que se vivió con la llegada del temporal Filomena a través de informes solicitados a los pilotos que volaron el día de la tormenta y posteriores. El objetivo perseguido ha sido siempre facilitar la ayuda necesaria a clientes y compañías aéreas que reafirme la profesionalidad aplicada ante situaciones tan adversas como la vivida.
Asimismo, una vez detectados los fallos, proponer soluciones y respuestas para afrontar con éxito similares situaciones que se pudieran dar en un futuro. Y reforzar ante todo, acciones que hayan contribuido al aumento de la seguridad frente a las dificultades existidas en estos días, sin olvidar el contexto de la pandemia que estamos viviendo.
A la pregunta de si estaba el aeropuerto de Madrid preparado para la nevada del siglo, la respuesta es «no»
Las previsiones y avisos tanto de las nevadas y de la ola de frío fueron correctamente comunicados y con la suficiente antelación, pero el aeropuerto reaccionó mal y tarde. Además, Barajas ya contaba con material suficiente para afrontar un temporal de estas características a raíz de la nevada menos intensa que ocurrió en 2009. El aeropuerto no puso a punto sus efectivos humanos y materiales en el momento de dar comienzo la nevada y tuvo que recurrir a la Unidad Militar de Emergencia (UME) para limpiar las instalaciones. Las deficiencias en el estado de las pistas y calles de rodadura junto con la mala gestión de las mismas, en las que no se tuvo en cuenta al Servicio de Pista y Plataforma (SPP), generaron en problemas que amenazaron la seguridad operacional de los vuelos.
Todo este cúmulo de errores derivó en el cierre total del tráfico aéreo en el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid Barajas, un aeropuerto de referencia internacional. Además, la posterior recuperación fue bastante complicada y de hecho el mal estado de las pistas fue consecuencia de muchos daños en el fuselaje de los aviones. Una pronta actuación hubiera evitado indiscutiblemente muchos de los problemas y daños ocasionados por el temporal.
Esperemos que este documento asiente las bases para que lo analizado sirva de aprendizaje de todo lo ocurrido en esos días. Los errores, obviamente, nos muestran lo que necesitamos mejorar. Se trata simplemente de aprender de ellos y fomentar las mejores prácticas.
Este viernes a las 20:00 contaremos en el programa de AviaciondigitalTV con el resumen de las noticias mas importantes de la semana, con el autor de este informe, Francisco Cruz.
