Murcia, SP.- El profesor de la Universidad Rey Juan Carlos, Roberto Villa, realizará un informe histórico que complemente el expediente sobre la denominación del Aeropuerto Internacional de la Región de Murcia, Juan de la Cierva, y tacha de sesgados los argumentos del historiador Angel Viñas, único informe en el que se basó la Secretaría de Estado de la Memoria Histórica, para denegar el cambio de denominación.
Así lo anunciaba el Consejero de Murcia de Fomento José Ramón Díez de Revenga tras reunirse con Villa. Villa sostiene que Juan de la Cierva nunca fue un fascista, y señalaba en La Opinión de Murcia, que si el aeropuerto no se denomina finalmente como el inventor del Autogiro «significaría que habrán triunfado los que quieren depurar póstumamente a nuestros antepasados sencillamente porque no les gustan sus ideas». El criterio de Villa consiste en apartar la cuestión política de la figura del inventor, cuyo legado científico es técnicamente indiscutible y un gran ejemplo de la aplicación de la ciencia en beneficio de toda la humanidad.
Revenga habla de lo poco riguroso del estudio de Viñas, al que acusa de ideológico y partidista.
Roberto Villa afirma que Juan de la Cierva «nunca fue un fascista, reconocieron su neutralidad hasta los republicanos…» en la Opinión de Murcia. Roberto Villa no cobrará por este informe.
Por su parte Angel Viñas, ha publicado una supuesta carta de De la Cierva al General Mola el 19 de septiembre de 1936, en infoLibre. Lo que desconocemos es si existe una relación entre la carta que publica Viñas y el apresamiento al iniciarse la Guerra Civil del hermano de Juan de la Cierva, Ricardo, en Madrid-Barajas, para reunirse con su mujer y sus 6 hijos en Francia, que terminó con el asesinato de Ricardo de la Cierva Codorniú en Paracuellos del Jarama el 7 de noviembre de 1936. Probablemente Juan de la Cierva, ya conocería en la fecha de la carta la situación de su hermano, y tendría conocimiento de lo que solía sucederle a los presos de la Cárcel Modelo de Madrid. Esto lo obvia Viñas, o no ha considerado que sepamos su detallada investigación al respecto.
Viñas dice sobre esta carta: «Lo reproducido aquí (transcripción de la carta original sin recorte ni modificación algunos) basta para ilustrar una línea del comportamiento del ilustre inventor del autogiro que cualquier historiador digno de ese nombre remontaría a los albores de la conspiración. Pasaría por su participación en el grupito de agitadores españoles y británicos en Londres antes del golpe, su gestión en el alquiler del Dragon Rapide, su viaje a Roma tras el golpe y una gran incógnita. La desveló su sobrino, el historiador Ricardo de la Cierva, en un programa emitido por Telemadrid el 13 de julio de 2011 sobre el asesinato de Calvo Sotelo. Mantuvo la tesis, clásica, de que Franco hasta entonces no había decidido sublevarse (falso), pero afirmó que “es verdad que ya había hablado mi tío Juan de la Cierva” con el supuestamente reticente general. Quizá tuviera algún papelín. O se lo inventó. Porque del profesor de la Cierva (qepd) no siempre hay que fiarse y es mejor no hacerlo, salvo en circunstancias muy controladas documentalmente».
Habla de «cualquier historiador digno» en los albores de la conspiración, aunque esté fechada el 19 de septiembre de 1936, cuando ya se había iniciado la contienda. Y por otra parte habla de que «no siempre hay que fiarse de Ricardo de la Cierva», historiador, «y es mejor no hacerlo» «salvo en circunstancias muy controladas documentalmente», es decir utiliza parte de una entrevista a la que da credibilidad, mientras que pone en cuestión a Ricardo de la Cierva, quizás en otros fragmentos no convenientes para sostener su sesgada tesis. Juez y parte en el amplio sentido de la palabra.
