SAFETY/La compañía australiana Tiger Airways continúa en su intento fracasado por convencer al regulador de Aviación Civil de que puede conducir operaciones seguras a pesar de haberles ordenado este año mejorar el entrenamiento y la habilidad de los pilotos.
La Autoridad de Seguridad de Aviación Civil de Australia suspendió la actividad del operador el 2 de julio declarando que cree que "plantea un riesgo serio e inminente para la seguridad aérea".
A la decisión le precede una noticia publicada en marzo sobre la línea low-cost en la que le ordenaban que los entrenamientos de los pilotos y el control de la fatiga fueran más estrictos, mejorar el control de mantenimiento y reforzar la estructura de gestión operacional.
Estas condiciones fueron impuestas en el certificado de operador de la compañía aérea y CASA asegura que la aerolínea ha sido examinada desde entonces. Pero los últimos acontecimientos- particularmente dos incidentes en junio en los que un Tiger Airbus A320s descendió por debajo de la altitud mínima en aproximación- han obligado al regulador a tomar medidas drásticas.
"En estas circunstancias CASA ya no tiene confianza en la capacidad de Tiger Airways Australia para hacer frente de manera satisfactoria a los problemas de seguridad que han sido identificados," dice.
La suspensión, en un principio por cinco días hábiles, ha dejado en tierra a Tiger hasta el 9 de julio pero CASA podría solicitar al tribunal federal australiano la extensión la suspensión del servicio, si fuera necesario, con el fin de llevar a cabo una investigación exhaustiva.
Tiger Airways Australia dice que tiene que "atenuar la interrupción inmediata de pasajeros en la medida de nuestra capacidad" y se centra en la cooperación con CASA para "alcanzar un resultado satisfactorio de esta investigación lo antes posible".
Añade que han tomado medidas internas para abordar cuestiones específicas y otras más generales concernientes a CASA diciendo: "Queremos asegurar a la opinión pública australiana que tenemos y tendremos seguridad en nuestras operaciones en todo momento."
La aerolínea es un spin-off de Tiger Airways de Singapur pero los servicios de Singapur no se ven afectados.
"Nos hemos comprometido a resolver estos [problemas] rápidamente y reanudar nuestros [vuelos domésticos] tan pronto como sea posible," asegura Tiger.
Virgin Australia ha intervenido para ofrecer tarifas especiales a los pasajeros afectados de Tiger en ciertas rutas.
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