(NOTIMERICA.com) Santiago de Chile, CH, 9 de febrero de 2015.- Las historias sobre aviones que desaparecen sin dejar rastro son algunas de las más duras, ya que mantienen en vilo y agonía a las familias de los pasajeros de manera indefinida… Hasta que aparecen los restos. En el caso del avión Douglas DC-3, CC-CLDP, de LAN Chile 210 de Castro a Santiago de Chile, que transportaba a un equipo de fútbol chileno, han tenido que pasar 53 años para poder dejar atrás esta incertidumbre y poder, así, pasar página. El avión, en el que viajaban 24 personas -técnicos y jugadores del famoso equipo del Green Cross- se estrelló en Los Andes en 1961, cuando volvían de jugar un partido fuera de casa. Todos fallecieron.
El suceso creó una gran conmoción en su momento en el mundo entero y, durante mucho tiempo, estuvieron luchando para dar con el paradero. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos, la búsqueda nunca dio sus frutos, hasta ahora.
Hace unos días, un equipo de expertos andinistas consiguió dar con el paradero de los restos del aeroplano, que muchos daban por perdidos definitivamente.
De acuerdo con el diario 'La Segunda', los investigadores encontraron los restos a 3.200 metros de altura en la cordillera de Linares, a 306 kilómetros de Santiago.
«El avión está a más de 3,200 metros de altura. Se conserva gran parte del fuselaje, mucho material esparcido en el lugar e incluso restos óseos», indicó Leonardo Albornoz, uno de los expedicionarios.
Aunque este domingo se difundieron imágenes del lugar del accidente, Albornoz aseguró que la ubicación exacta del accidente no será desvelada para que el lugar sea respetado. «No queremos decir la ubicación exacta, porque si lo revelamos esto se va a convertir en un circuito turístico y no queremos que eso pase», apuntó.
Los montañeros que descubrieron el paradado construyeron una cueva improvisada con piedras donde colocaron una imagen de la virgen, un rosario, agua bendita, y encendieron velas.
«Sentí la energía del lugar. Se podía respirar el dolor», confesó Albornoz sobre el lugar de los hechos.
El accidente se produjo cuando los jugadores volvían a la capital chilena tras disputar un partido de Copa fuera de casa contra el Osorno. Al parecer, el grupo se dividió en dos aviones. En el que terminó estrellándose, viajaban ocho futbolistas.
El Green Cross, fundado el 27 de junio de 1916, no se pudo reponer de la tragedia aérea, y una temporada más tarde descendió a segunda división.
