Madrid, SP, 12 de febrero de 2014.- La denuncia del responsable de la Central Sindical de Funcionarios Independientes(CSIF) en la Agencia Estatal de Meteorología, ha conseguido que ésta reaccione aprobando un Plan Anual de 2015 en el que se presten sus servicios meteorológicos a la Navegación Aérea, con la esperanza de la mejora de la seguridad, regularidad=orden y eficiencia del transporte aéreo tanto en el ámbito militar como en el civil. Lo denunciado por el sindicato era de tal gravedad, que, como contamos a los lectores de AD en enero, la propia AESA, que no brilla especialmente por su independencia, en una Auditoría Externa había advertido en 2014 que «AEMET no garantiza que se gestione adecuadamente la seguridad de los servicios de NA«. Los recortes habían llegado nada menos que a otro de los eslabones de la cadena de seguridad aérea como es la predicción meteorológica, que según palabras del responsable del sindicato, Carlos Yebra, a EP, «en el Centro Nacional de Predicción de la Defensa, había franjas de hasta seis horas donde no hay nadie» al falta un meteorólogo y un analista predictor en la plantilla. Se ha reducido un 10% de la plantilla, sin reposición desde 2012.
EP/La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha aprobado el Plan Anual 2015 para prestar sus servicios meteorológicos a la navegación aérea que aspira a «mejorar la seguridad, regularidad y eficiencia del transporte aéreo».
Según los objetivos del plan se pretende «superar una serie de metas de rendimiento» que el año pasado llegaron a una disponibilidad media de los productos meteorológicos aeronáuticos del 99,6 por ciento, frente al objetivo del 98,6 por ciento, mientras que la puntualidad media de los productos meteorológicos aeronáuticos fue del 98,6 por ciento, frente al reto del 98%.
Además, el porcentaje global de pronósticos para aeropuerto con un nivel categorizado como «bueno» fue del 92,4 por ciento, frente al objetivo del 91 por ciento. En 2014 se desarrolló completamente el prototipo del pronóstico automático de tormentas en las áreas de aproximación a los aeropuertos y comenzó a operar el nuevo sistema automático de acceso a la información meteorológica aeronáutica (AMA) con nuevos productos y servicios.
La secretaría de Estado de Medio Ambiente, de la que depende la AEMET, ha destacado que el plan permitirá que los 48 aeropuertos y bases aéreas abiertas al tráfico civil en España, que cuentan con presencia de profesionales de AEMET, se beneficien de servicios y productos optimizados y adaptados a sus necesidades.
Asimismo, el plan para este año considera las responsabilidades actuales y futuras de la AEMET en el marco del Cielo Único Europeo, la situación del Sistema de Navegación Aérea de España y el entorno socio-económico.
En relación con esta materia, el pasado 9 de enero la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-F) denunció «deficiencias» en la información que la AEMET facilita al Minsiterio de Defensa y para la Seguridad Aérea por la falta de recursos humanos.
Según el secretario general de CSI-F en Aemet, Carlos Yebra, en el Centro Nacional de Predicción de la Defensa falta un meteorólogo y un analista predictor, lo que ha llevado a una reducción de horarios que ha implicado que existen unas franjas de 6 horas en las cuales no hay ninguna persona que pueda atender a Defensa. «No hay nadie en la oficina. No hay a quién recurrir», insistió.
En una rueda de prensa ofrecida para denunciar la falta de personal en la AEMET, Yebra apuntó que un informe de auditoría externa de la Agencia Española de Seguridad Aérea de 2014 adviertió de que «AEMET no garantiza que gestione adecuadamente la seguridad de los servicios de navegación aérea que presta».
Según datos del Registro Central de Personal ofrecidos por Yebra, la plantilla de la AEMET se ha reducido en un 10 por ciento desde 2012, hasta los 1.255 efectivos y se han jubilado 280 personas en los últimos seis años. «La situación es verdaderamente grave por la falta de personal», valoró.
A su juicio, como consecuencia se ha producido empeoramiento en la calidad de las predicciones, especialmente en la predicción por municipios, asociada a la automatización y modificación de tareas, multiplicando el número de quejas de usuarios, lo que pone en riesgo su viabilidad como servicio público, además de poner en riesgo la seguridad de las personas y bienes, en ámbitos como el espacio aéreo.
