Gran Canaria, SP.- El incendio declarado en el sábado en el barrio de Juncalillo, en las cumbres de Gran Canaria, sigue contenido dentro de un perímetro de unas mil hectáreas pero no está ni controlado, ni estabilizado; además, se está a la espera de cómo evolucione el viento, pues durante la noche se esperaban rachas máximas de entre 40 y 70 kilómetros por hora.
Nueve helicópteros, avión de coordinación y un CL415 del Ejército del Aire, colaboran desde el aire en su extinción, además de un operativo terrestre de 230 personas. El fuego en estos momentos continúa sin control tras una noche donde el viento ha sido el gran enemigo de su estabilización y control. 23 kilómetros de perímetro donde se intenta contener en estos momentos. Más de 1000 personas han sido desalojadas.
La UME ha desplegado ya 177 militares en la zona desde el pasado sábado. (Seguiremos informando)
