El pasado día 6 de junio tuvo lugar en la exhibición aérea de la Fundación Infante de Orleáns (FIO) la presentación del avión escuela ruso Polikarpov U-2. Este aparato de entrenamiento elemental era el avión de formación estándar de las escuelas aeronáuticas soviéticas de los años 30 y su vida operativa se alargó hasta la Segunda Guerra Mundial, en la que sirvió en tareas de enlace, observación artillera, traslado de heridos y como avión de bombardeo nocturno contras las tropas alemanas.
El servicio nocturno, que tenía mucho de guerra psicológica ya que las misiones de los aviones se intercalaban a lo largo de la noche para privar a los alemanes del sueño, fue realizado por el 588º Regimiento de aviadoras femeninas creado a instancias de la pionera de la aviación soviética Marina Ráskova.
Coincidiendo con la presentación de este biplano, la FIO brindó un sentido homenaje al aviador republicano José María Bravo Fernández, fallecido en diciembre de 2009. Al iniciarse la guerra civil española, Bravo formó parte de la Primera Expedición de Pilotos que se entrenó en la Escuela de Aviación de Kirovabad (República de Azerbaiyán) en el Polikarpov U-2 y en España llegó a ser segundo jefe del Grupo 21 (Polikarpov I-16) de las Fuerzas Aéreas de la República. Durante su exilio en la URSS, combatió en las VVS (Fuerza Aérea Soviética) donde alcanzó el grado de coronel. En el estuvieron presentes familiares, amigos, miembros de la Asociación de Aviadores de la República (ADAR) y numeroso público que contempló las evoluciones del U-2 sobre Cuatro Vientos en homenaje de José María Bravo.
