Madrid, SP.- Los vaivenes en las relaciones laborales en la compañía Air Europa, tienen, según fuentes conocedoras del proceso vivido en estos años, un fiel reflejo en la deriva de despachos de abogados que desde el origen de este conflicto, con aquel «ERE», hasta hoy, han representado al operador español. Sagardoy Abogados, Price Waterhouse&Coopers y Michavila-Acebes, MA Abogados.
Sólo vayan por delante tres cuestiones en este sentido, que podrían explicar lo sucedido. También está presente el perfil personal del máximo del empresario salmantino, Hidalgo, y su visión de lo que es o debe ser una empresa o compañía aérea. Esta «visión», incluso con el consejo legal pertinente sobre sus movimientos, no parece sencillo que cambie según los años pasan. Al contrario Hidalgo se reafirma en sus convicciones de lo que deben ser las relaciones laborales, nos señalan fuentes consultadas. «No afloja ni un poquito con los años…»
Una premisa es que en ocasiones cuando los representados no escuchan por parte de sus abogados eso que ellos quieren escuchar como consejo técnico legal, como podría haber sido en el primero de los casos, pierden por tanto la confianza en la que se basa esa relación, y se buscan otra representación legal más proclive a cumplir con sus expectativas.
En el segundo de los casos los oropeles de un rimbombante nombre internacional, PW&C, de lo que no deja de ser una franquicia, como cualquier otra de una multinacional en nuestro país, puede hacer que en principio deslumbren con su renombre al interesado, pero finalmente, vuelvan al redil de un trato de nuevo algo más personal y directo.
Entonces nos encontramos actualmente con otro despacho, Michavila y Acebes, MA Abogados, dos ex-ministros de Justicia, ponen el nombre, y por lo tanto la representación legal se aproxima a la realidad política del momento inevitablemente. Esta firma fundada en 2012, cuenta con otros bufetes como el de Trías de Bes y Vidal Cuadras Abogados en Barcelona, con ese perfil, también ex-político entre sus socios.
Quizás esta proximidad entre lo político y lo jurídico pueda haber hecho pensar que era una buena solución para intentar sacar de algunos pozos jurídicos a la compañía de Hidalgo en su relación con sus trabajadores.
La importante carga política en el presente momento político que podría tener una huelga de pilotos en plena temporada de verano, puede que haya hecho el resto, y dado el necesario empujoncito para posponer la convocada por SEPLA a través de un pacto «parcial y temporal» que es el alcanzado hasta el 30 de noviembre señalan desde el sindicato de pilotos. La piedra angular del conflicto, en estos momentos es el desvío de la producción de Air Europa a Aeronova–Air Europa Express, algo que si tomamos como referencia lo sucedido en Iberia con Iberia Express, parece a medio plazo algo más que inevitable. La cuestión es si el aumento de la producción se hará con capital humano propio-como el Convenio Colectivo de los «sepleros»-expresión empleada por JJHidalgo, parece indicar- o si se seguirá el modelo Binter, por ejemplo, donde Canair o Naysa, explotan las rutas de la compañía canaria, y la matriz, Binter, sólo dispone de un avión, y de la marca, con tripulaciones de nuevo cuño en sus relaciones laborales con la matriz.
Finalmente otra cuestión… En medio de todo esto hay una cuestión que choca. ¿Que será de los TCPs y TMAs, y resto del personal (tierra, handling, etc..) de Air Europa en medio de la que se avecina?. De ello nos ocuparemos en breve.
SEPLA en Nota de Prensa, lo explica así, mientras Fomento se siente feliz por la resolución en este complicado momento político, e Hidalgo, cualquier sabe lo que estará pensando…
SEPLA desconvoca la huelga de pilotos en Air Europa
NP SEPLA/Después de semanas de intensas negociaciones, la compañía ha accedido finalmente a firmar un acuerdo con los representantes de sus pilotos. SEPLA mostró desde el inicio una gran predisposición a cancelar la huelga, con el fin de no perjudicar a los pasajeros de la compañía. De hecho la semana pasada, en el marco de la mediación del SIMA, SEPLA ofreció un acuerdo de desconvocatoria en términos similares al actual, que contemplaba la paralización temporal del trasvase de producción. En aquel momento, la compañía se negó a pactar con SEPLA.
El acuerdo no supone en modo alguno el reconocimiento por parte de SEPLA del derecho de la empresa a llevarse producción a otra compañía externa, sino que es un acuerdo para retomar el diálogo con la empresa, tratar de evitar el vaciado de producción y, en última instancia, llegar a un acuerdo definitivo que ponga fin a estos cinco largos años de conflictividad. En este sentido, SEPLA recuerda que ofreció en su día un plan a la compañía que suponía un ahorro de costes mayor al que consigue Air Europa llevándose su producción a otra compañía. La intención de los pilotos de Air Europa es seguir pilotando los aviones de la compañía para proyectar en ella su futuro profesional.
El pacto actual es un primer paso para restablecer la confianza entre las partes de cara al futuro. “Es imprescindible que Air Europa comience a tratarnos como el legítimo interlocutor de su colectivo de pilotos, –señalan desde la Sección Sindical de SEPLA en Air Europa- y comience una relación fructífera basada en el diálogo y el respeto mutuo”.
