Guadalajara, SP, 19 de julio de 2013.- "Por sus obras les conocereís…", dice la única frase bíblica, que podría definir con precisión, lo que le pasa por el cuerpo a los profesionales del sector aéreo, a los profesionales de base, vamos a los que mueven el sector aéreo de verdad, cuando han tenido que tragarse esta mañana las distintas versiones de la reacción de un sonriente Blanco, en la tarde de ayer. Por mucho que se empeñe en intentar dejar impoluta su imagen pública, al desestimarse las acusaciones de prevaricación, cohecho y tráfico de influencias, indemne de mala gestión de lo público, ante la pública opinión, con el cierre del espacio aéreo, la militarización, la criminalización de todo un colectivo, o los 15.000 millones de boquete en una empresa pública, por poner ejemplos evidentes, de su responsabilidad política, no "lavarán sus manos, todas las lluvias del,…, noroeste", parafraseando una poesía convertida en canción revolucionaria de los 60.
Se le veía sonriente, ufano, contento. Justo lo contrario a los que han tenido que sufrir precisamente lo que él achacaba a no se sabe muy bien quien. A los que injustamente han sido acusados de sedición, privilegios. A esos a los que se echó encima con el apoyo mediático casi absoluto, en prensa, radio y televisión, la opinión publicada. Claro que hubo infundio político en la condena de este colectivo. Infundio compartido por los suyos y por los otros que hoy gobiernan. Tal es el infundio cómplice de los dos grandes partidos, grandes por los grandes privilegios de los que disfrutan, grandes por la repercusión que tiene todos y cada uno de sus vacíos y maquillados mensajes que los medios retransmiten.
Los injustamente acusados, los privilegiados, a los que exclusivamente por una demostración política de la casta dominante, del PSOE y del PP, no nos engañemos ya, tambien se resintieron familiarmente de este ataque que abarcaba desde los derechos fundamentales a los individuales. Han pasado ya más de dos años, pero las secuelas siguen ahí. El sistema aeronáutico funciona peor aún, las víctimas de los accidentes no han obtenido, según ellos mismos dicen, mas que desconsuelo e incluso insultos a su inteligencia. El "aliento" de su familia, lo esgrime como símbolo de que detrás quizás haya humanidad. La misma que no ha habido al provocar inmenso dolor y sufrimiento a miles de personas, con sus decisiones, con su gestión y la de su equipo. Con esos 15.000 millones de ala, que han provocado la quiebra técnica de un Ente que mueve turistas, el único salvavidas real de la economía nacional en estos momentos-consecuencia. Todo ello bien regado en cientos de conversaciones no punibles penalmente. Y ¿qué?. En un país donde el presidente del Tribunal Constitucional, se vanagloria de su adscripción política. No hay legitimidad, no hay futuro para el ciudadano en esta hedionda e irrespirable cloaca en la que están convirtiendo España. Entre unos y otros. Es más, unos y otros, todos ellos en su conjunto.
Pero lo que hace que la regurgitación se convierta en vómito directamente, es el último párrafo de un artículo aparecido en El País. Lo reproducimos, esperando que la digestión del desayuno del lector esté ya terminada. Dice: "No ha querido dar nombres propios, ni de apoyos ni de desafectos, pero sí ha señalado que han sido muchas las sorpresas ""positivas"" al recibir la solidaridad de personasa que no esperaba, entre ellas, ""dirigentes del PP"". Y remata la digestión de esta buena noticia sólo apta para políticos de la casta general, "Ojalá el infundio deje de ser un instrumento de ataque político".
Pero, si uno de estos días, se materializa el rumor insistente, de las aspiraciones como Eurodiputado del tal Blanco, recomendamos al lector que directamente se dedique al ayuno. Aunque corra el peligro de que la bilis moral, tambien sea vomitada.
Lo dicho: "No lavarán sus manos, todas las lluvias del,…, noroeste"
Guadalajara, SP, 19 de julio de 2013.- "Por sus obras les conocereís…", dice la única frase bíblica, que podría definir con precisión, lo que le pasa por el cuerpo a los profesionales del sector aéreo, a los profesionales de base, vamos a los que mueven el sector aéreo de verdad, cuando han tenido que tragarse esta mañana las distintas versiones de la reacción de un sonriente Blanco, en la tarde de ayer. Por mucho que se empeñe en intentar dejar impoluta su imagen pública, al desestimarse las acusaciones de prevaricación, cohecho y tráfico de influencias, indemne de mala gestión de lo público, ante la pública opinión, con el cierre del espacio aéreo, la militarización, la criminalización de todo un colectivo, o los 15.000 millones de boquete en una empresa pública, por poner ejemplos evidentes, de su responsabilidad política, no "lavarán sus manos, todas las lluvias del,…, noroeste", parafraseando una poesía convertida en canción revolucionaria de los 60.
