Alba Sanz/Aviación Digital, Sp.- 18 meses de margen son los que se ha dado el Gobierno para iniciar la liberalización de los servicios de control de tránsito aéreo de los, ya confirmados, siete aeropuertos españoles. Esta pasa a ser la mayor privatización de controladores aéreos que se ha planteado en España.
De esta forma, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, al frente de Raquel Sánchez, ha encargado a Aena publicar la licitación de las bases de las torres de control que pasarán a ser gestionadas por empresas privadas antes de agosto del año 2024.
Por otro lado, esta decisión ha sido acogida de buen agrado por parte de la Asociación de Líneas Aéreas (ALA), quien opina que esta privatización contribuirá «de forma decisiva» a la competitividad del sector aéreo.
El Ministerio ya ha confirmado que las torres de control que se someterán al proceso de privatización pertenecen a los aeropuertos de Bilbao, Gran Canaria, Tenerife Sur, Tenerife Norte, Málaga-Costa de Sol, Palma de Mallorca y Santiago. De esta forma, las torres de control de dichos aeropuertos se suman a las ya privatizadas de los aeropuertos de Sabadell, Madrid-Cuatro Vientos, A Coruña, Alicante, Ibiza, Jerez, Sevilla, Valencia, Vigo, La Palma, Lanzarote y Fuerteventura.
En esta nueva privatización, son dos empresas las que van a tratar de dividirse el control de las nuevas torres. Se trata de Saerco y Ferronats, la antigua filial de Ferrovial que fue vendida al fondo Portobello, en un momento en el que Serveo ha conseguido hacerse con el 100% de Ferronats.
De hecho, este acontecimiento ya ocurrió en el año 2020, cuando Aena adjudicó el control de las torres de 12 aeropuertos por 101.9 millones de euros, de los que Alicante, Valencia, Ibiza y Sabadell fueron a parar a manos de Ferronats mientras que los de Vigo, Jerez, Sevilla, A Coruña, Cuatro Vientos), La Palma, Fuerteventura y Lanzarote) fueron confiados a Saerco.
