Washington, USA.- Boeing ha informado a la FAA que ciertas partes de los 737NG y 737MAX que se utilizan para guiar las superficies de control móviles en el borde de ataque delantero de las alas de los aviones que se despliegan durante el despegue y el aterrizaje, los Slats (dispositivos hipersustentadores), pueden haber sido fabricados inadecuadamente y puede que no cumplan todas las normas aplicables de resistencia y durabilidad.
Tras una investigación llevada a cabo por Boeing y la Oficina de Gestión de Certificados FAA (OCM), han determinado que hasta 148 piezas fabricadas por un sub-proveedor de Boeing se verían afectadas.
Boeing ha comunicado a la autoridad aeronáutica americana que estas deficiencias van obligar a inspeccionar más de 300 aviones de manera preventiva.
Estas deficiencias no parecen tener conexión con los accidentes del 737 MAX en Indonesia y Etiopía.
La FAA ha informado que las partes afectadas pueden ser susceptibles a un fallo prematuro o grietas resultantes del proceso de una fabricación inadecuada. Aunque un fallo completo de estas piezas no resultaría catastrófico, el riesgo es que una pieza defectuosa puede ocasionar daños al avión en vuelo. Algo más que discutible.
La FAA emitirá una directiva de aeronavegabilidad para ordenar las acciones de servicio de Boeing y para identificar y eliminar las partes discrepantes del servicio. Los operadores de las aeronaves afectadas deberán de realizar esta acción correctiva dentro de los próximos 10 días. La FAA también alertó a las autoridades de aviación civil internacional de la situación y de las acciones requeridas.
