Atalayar / José María Martin.- Abu Dabi planea enviar 68 cazas a Rabat y El Cairo en nuevo episodio de cooperación militar. Marruecos lleva tiempo trabajando en un rearme desde que rompiese relaciones diplomáticas con Argelia. La tensión en el norte de África a raíz del distanciamiento entre ambos países ha sufrido una importante escalada en los últimos tres meses. La autoridad sobre el Sahara Occidental fue el principal detonante de unos lazos que resultaban clave, sobre todo por el suministro de gas para países como España. La carrera armamentística de Rabat y Argel vive ahora un nuevo capítulo con el envío de una flota militar por parte de Emiratos Árabes Unidos al reino alauí.
Emiratos sí reconoce la autoridad marroquí sobre el Sahara Occidental, y Marruecos hace lo propio con la de EAU sobre las islas Tunb mayor y menor, y Abu Musa. Las históricas relaciones que unen Abu Dabi y Rabat facilitan enormemente la colaboración entre dos países que deben ser líderes regionales. Por eso, Emiratos tiende la mano a su aliado marroquí en un momento de gran complejidad debido a la disputa con Argelia. También lo hace con Egipto, otro aliado de los emiratíes, con quien el reino se repartirá los 68 cazas que Emiratos Árabes Unidos enviará a ambos países.
Los cazas Mirage 2000-9 son los elegidos para reforzar el arsenal armamentístico de Marruecos y Egipto, según el medio especializado en materia de defensa “Defense Arabe”. Se trata de un modelo más avanzado diseñado a partir del Mirage fabricado por Francia que hizo su primer vuelo a finales de los años 70. Esta nueva versión del caza es únicamente desarrollada por Emiratos y cuenta con un sistema de tecnología militar muy avanzado en comparación con su predecesor. Este envío de cazas se produce al mismo tiempo que Abu Dabi adquiere 80 nuevos cazas procedentes de Francia, los Rafale.
Para Marruecos es un paso más dentro de su plan armamentístico en el que ha trabajado intensamente desde la llegada al poder de Aziz Akhanouch. En los últimos meses, Rabat ha estrechado sus lazos con los que deberían ser importantes aliados a largo plazo, como Israel. El establecimiento del embajador David Govrin fue el primer movimiento que dejó entrever lo que iba a suceder entre ambos países. Tras ello, marroquíes e israelíes firmaron un acuerdo de seguridad “sin precedentes”, según el ministro de Defensa de Israel, Benny Gantz.
La adquisición por parte del reino de los sistemas defensa Cúpula de Hierro de la empresa Rafael Advanced Defense Systems es uno de los más importantes dentro del memorando sellado a finales del mes de noviembre con el viaje del ministro Gantz al reino alauí. El que fuese el primer viaje de un ministro de esta cartera a Marruecos “permitirá las exportaciones israelíes a Marruecos”, no sólo en materia militar sino también en otro de los aspectos fundamentales como es la ciberseguridad. El “interés común para consolidar las relaciones” del que hablaba el Gobierno marroquí en su comunicado se reforzó, como hace ahora con Emiratos Árabes Unidos, gracias a las importaciones que continúan llegando a Rabat para asegurar su liderazgo en el norte de África.
