C. Cottrell, Aviaciondigital.- Dentro del ciclo de entrevistas organizado por EUROCONTROL para recopilar las opiniones de distintos actores relevantes de la industria bajo la temática «¿Cómo podemos reconstruir una mejor aviación europea después del COVID-19 y cómo será nuestra industria en cinco años?», ayer le toco el turno a Willie Walsh, director ejecutivo fundador de IAG.
Algo decepcionante su intervención, ya que en todo momento de la entrevista , ha procurado en todo momento ser muy “polite”; se esperaba una mayor implicación de una persona que ha sido protagonista de uno de los mayores grupos de aviación del mundo como es el Grupo IAG .
Nos quedamos con que , según la opinión de Walsh, «no hay reestructuración posible, hay que imaginar otros modelos y estructuras e intentar llevarlas a cabo en un entorno complicado e interconectado«.
A punto de combatir la segunda ola, nos enfrentamos a una crisis pandémica global sin precedentes, con datos tan alarmantes como una disminución del 51% del tráfico aéreo doméstico y hasta un 71% en larga distancia, sin embargo Willie Walsh aseguró hace unos meses a un medio de comunicación que el impacto en la industria seria marginal: «después del 11 de septiembre, un brote de SARS y una crisis financiera, estamos mucho más capacitados para responder a un shock económico como el coronavirus.” A día de hoy parece que no piensa igual…
Walsh empezó su intervención afirmando que es de vital importancia una coordinación eficiente entre países, su falta, esta matando a la industria. Insiste en que sigue existiendo mucha demanda, pero al mismo tiempo hay miedo a las restricciones y riesgos a los que se pueden enfrentar.
Ante la pregunta ¿es esta una oportunidad para reconstruir desde el pasado?, lo niega categóricamente: “nos enfrentamos a una crisis sin precedentes, no va a existir una vieja normalidad, ni siquiera una nueva”.
«En esta situación tan excepcional, los distintos gobiernos tienen que entrar como protagonistas y testigos de fusiones y de acuerdos entre las distintas aerolíneas y estas, a su vez, saber reconocer las posibles presiones políticas».
Nos enfrentamos a un binomio tecnología-medio ambiente pendiente de optimizar
Willie Walsh sobre sobre la gestión del tráfico aéreo
Considera que la gestión aeroportuaria no es óptima y se necesita enfatizar en errores pasados, basados fundamentalmente en una inversión poco eficiente.
Es prioritario el papel de las aerolíneas junto al de los políticos en cuanto a la consolidación de estas acciones
Willie Walsh
Así como considera el papel de los distintos gobiernos fundamental en una primera etapa, también está convencido de que habría que sacarlos en un futuro de la ecuación.
Con respecto a las consecuencias del Brexit y sí cree que supondrá para países como Alemania y Francia mayores ventajas competitivas, Walsh no lo cree, está convencido de un entorno libre en el que BA se enfrentará a un proceso de acuerdos complicados pero no imposibles.
Hace una alusión a Alitalia, afirmando que habría que evitar volver a la misma estructura que ha demostrado ser del todo ineficaz, siendo apoyada por su gobierno y la Unión Europea.
Sobre el futuro, Walsh ve a la industria a cinco años, «reducida, más consolidada y terriblemente competitiva«. Y ¿a veinte años?, su opinión es que la industria habrá crecido, los aeropuertos y la gestión del tráfico aéreo serán más eficientes capaces de enfrentarse a futuras crisis.
Para finalizar la entrevista se le pide un mensaje positivo: «nos enfrentamos a un reto diferente y en cierta manera estimulante. La eficiencia necesita un cambio.«
Cómo pueden leer, poco se ha mojado Walsh en esta entrevista concedida a Eurocontrol, aunque siempre es bueno escuchar todas las opiniones.
