Madrid, SP, 9 de diciembre de 2013 (ATENEA DIGITAL/Juan Narro).- A lo largo del año 2010 fui expresando en este digital –«la seguridad aérea y los controladores», del 25 de febrero; «¿quién está jugando con la seguridad aérea?», del 7 de mayo; «sobre la seguridad aérea», del 13 de diciembre- una creciente preocupación por la seguridad aérea, fruto de la demonización a la que sistemáticamente habían sido sometidos los controladores aéreos por parte de la dirección de AENA y del Ministro de Fomento, el señor Blanco, para ocultar la deficiente gestión del ente y sus abultadas pérdidas económicas.
Esta operación de «acoso y derribo» culminó en el puente de Diciembre de ese año 2010 con el cierre del espacio aéreo, la acusación a los controladores de que habían abandonado sus puestos de trabajo y finalmente con su militarización. Todo ello provocando sin duda un positivo plus político para el señor Blanco.
En contra del ambiente general, sólo «Aviación Digital» y ATENEA Digital mantuvieron una actitud discrepante, considerando que se estaba jugando seriamente con la seguridad aérea, y que se intentaba ocultar con cortinas de humo la lamentable situación de AENA con sus múltiples aeropuertos deficitarios y la mala gestión de las relaciones laborales con sus controladores.
El riesgo para la seguridad podía ser tan grave como expresaba A. Viñas en un artículo publicado en El Confidencial -«Carta abierta al sentido común»- donde ponía de manifiesto la tensión a la que se puede ver sometido un controlador que, demonizado por la opinión pública y amenazado por el Fiscal General con grandes penas de cárcel, tras acudir al juzgado, tiene que sentarse ante una consola de la torre o centro de control y procurar que el tráfico sea lo más seguro posible. Como dice Viñas en esos dos puntitos de la pantalla hay centenares de vidas en sus manos.
Tres años después, la justicia nos está dando la razón. Diecinueve juzgados han sobreseído ya la causa contra los controladores por el pretendido abandono de su puesto durante el puente de la Constitución de diciembre de 2010.
En el artículo de D. Forcada publicado el día 7 en El Confidencial -«De villanos a inocentes: 19 jueces fallan a favor de los controladores en la crisis aérea«- se cita un fragmento del escrito presentado por el abogado del sindicato de controladores USCA, José Antonio Choclán -ex magistrado de la Sala de lo Penal de la Audiencia-, que recoge también las respuestas que dio ante el juez el director regional de AENA, Gabriel Novelles, y que «exculpan, mejor que ninguna otra argumentación, a los controladores aún imputados. Éstos, en ningún momento, se rebelaron contra AENA o dejaron su puesto de trabajo aun con el riesgo de dejar a aviones en el aire.
. P.- ¿Usted el día 3 por la tarde vio algún CTA o grupo de CTAs que se desenchufara y dijera hasta luego?
. R.- Ninguno
. P.- ¿Algún CTA no cumplió las órdenes o directrices de los responsables de la sala?
. R.- No sé a qué directrices en concreto se refiere, pero. (.) No hubo ninguno que en esa situación dejara de atender el tráfico.
. P.- ¿Cuando se toma esa decisión de reducción de capacidad es porque la gente se está yendo de la sala?
. R.- No
. P.- ¿Abandonan la sala?
. R.- No, no hay nadie que abandone la sala. Nadie abandona su puesto de trabajo. Nadie. (.) Nadie abandona su puesto de trabajo, nadie lo ha hecho nunca, ni lo hará jamás. Nadie abandonaba el puesto.
. P.- ¿Durante los días 3 y 4 hubo algún CTA que se fuera de su puesto de trabajo?
. R.- No, nadie se fue».
Creo que esta declaración habla por sí sola. Queda para la reflexión la capacidad del poder político para manipular la opinión pública, y la pregunta de si decisiones tan graves como el cierre del espacio aéreo y la militarización de determinados ciudadanos pueden quedar sin consecuencias.
