Aena vivirá en los próximos años una fuerte presión por los vencimientos de su deuda. Según el informe anual de la compañía, correspondiente al ejercicio 2010, tiene que amortizar o refinanciar más de 3.300 millones de euros entre 2012 y 2015. Es decir, en tres años verá cómo vencen más del 27 por 100 de sus créditos, que actualmente superan los 12.000 millones de euros.
No obstante, el próximo ejercicio no será el más exigente para la gestora aeroportuaria española, ya que tiene que devolver 661 millones. A partir de 2013, las tensiones irán aumentando, con más de 800 millones en 2013 y en torno a 900 en los dos ejercicios siguientes. La compañía tiene la mayor parte de sus créditos a largo plazo, ya que a lo largo de 2010 amortizó buena parte de sus líneas de financiación y las pólizas con proveedores. De esta forma, a 31 de diciembre, el saldo había bajado a 1.300 millones, poco más de la mitad que a finales de 2009.
Los tipos que paga Aena por su deuda, según el informe, oscilan entre el 2,11 y el 4,88 por 100 anual en el caso de los concedidos a interés fijos, aunque tres cuartas partes del total están referenciados al euríbor, por lo que están sometidos a mayor presión del mercado.
Aena tenía previsto adjudicar las concesiones de los aeropuertos de Barajas y El Prat en noviembre, pero ha decidido retrasar la fecha hasta principios de 2012. Para el próximo año también se espera la entrada de inversores privados en el capital de la compañía y, si se cumplen las predicciones del ministro de Fomento, José Blanco, también será el ejercicio en el que volverá a conseguir beneficios.