Fué hallada a 1300 metros de profundidad por un barco de los EEUU especializado a unos 10 kilómetros del aeropuerto de Beirut. De los 90 pasajeros no se rescataron sobrevivientes. El avión, un Boeing 737-800 de la compañía Ethiopian Airlines, transportaba en el momento de la tragedia de 90 personas entre pasajeros y tripulación, la mayoría de ellos de nacionalidad libanesa y etíope.
La principal hipótesis sobre la causa del accidente son las razones meteorológicas, debido a la fuerte tormenta en el momento del accidente. Las autoridades libanesas descartaron la posibilidad de un atentado según informa el diarios español El Mundo en su versión on line.
Cabe señalar que hasta ahora existen informaciones contradictorias sobre los cadáveres localizados porque mientras las autoridades libanesas dicen que sólo se han recuperado 14 cuerpos, Ethiopian Airlines informó de que los cadáveres encontrados eran 60, aunque sólo 14 de ellos identificados.