Madrid, SP, 28 de diciembre de 2013.– La firma estadounidense de tecnología aeroespacial Windspeed ha presentado un diseño bautizado como SkyDeck que permite a los pasajeros disfrutar de un techo acristalado al igual que en un coche, para disfrutar de los paisajes celestes.
La nueva propuesta consiste en una especie de burbuja de vidrio está pensada para ubicar dos asientos giratorios en la parte superior del avión, a los que se podrá acceder por una pequeña escalera, o bien a través de un ascensor desde la suite.
Una vez allí el viajero puede girar el asiento hasta 360 grados para disfrutar de unas vistas únicas a través de una burbuja transparente. La cabina puede ser instalada en diferentes aeronaves, desde jet privados a aviones comerciales.
Según la compañía creadora el SkyDeck «va a revolucionar el entretenimiento a bordo», que no ha cambiado demasiado durante décadas. En su video de presentación asegura que es mucho «más exclusivo» que una Primera Clase y las vistas que se permiten superan con creces a las disponibles desde una ventanilla típica.
Las compañías podrían utilizarlo como una oferta vip para sus clientes o bien como una forma de generar nuevos ingresos, bajo la fórmula «pago por visión».
Este proyecto debe recibir aún el visto bueno de las autoridades, tras someterse a pruebas reales y normas de seguridad. La compañía creadora dice que está hecho del mismo material utilizado por los cazas militares por lo que es totalmente seguro.
Windspeed prevé utilizar materiales empleados en la fabricación de aviones supersónicos que garanticen, por ejemplo, la resistencia de la cúpula en caso de impacto con aves, según informa en un comunicado.
SkyDeck considera que «su diseño es viable y no interferirá con la conducción de una aeronave».
