Madrid, SP, 18 de febrero de 2014.- El titular lo pone el Jefe de la Sección Sindical de Sepla-Iberia Justo Peral, en una entrevista a Cristina Galindo en el diario El País. Ni una sóla palabra sobre la profesión en sí. Sobre la consideración en sí del máximo responsable de una aeronave. La reducción analítica de este piloto se centra en los costes, bajadas de sueldo, la rentabilidad, fatalismo tras la negociación, y el sacrificio de los pilotos para sacar adelante la compañía. La contradicción con la tésis sostenida en estos años en cuanto a que los pilotos no eran el problema sino la solución, salta hecha añicos cada vez que explica este Pre-acuerdo. Se trata de justificar lo injustificable, o ¿de qué se trata exactamente? Las explicaciones hacen que las contradicciones afloren por doquier, y se banalice algo que cuando uno es pasajero tambien suele valorar… Si a los pilotos se les paga menos que en easyJet, pero las FTL en Iberia van a llegar al límite de permisividad, menos restrictivo que en la británica. Si la normativa es más restrictiva para los pilotos de American o LAN Chile en los saltos atlánticos, todo ello en aras a la productividad. Si las 10:30 hrs. en escala se apuran, para los dos pilotos que en lugar de 3 como hasta ahora irán a bordo, etc, etc…,y no existe una directa relación entre el precio y la calidad de lo que ofrece este operador, la decisión como pasajero está tomada. El pasajero que quizás por principios no volaba en Ryanair por elección personal, dejará de hacerlo en esta compañía mayoritariamente británica pero con los tan criticados aquí en España vicios de algunas lowcost.
Recuerda mucho lo sucedido ahora con Iberia a la tesis sostenida por Blanco para embestir a los controladores aéreos. El peligroso discurso de Peral supone al menos visto desde fuera, un reconocimiento explícito. a la sobrevaloración de los salarios de los pilotos que la empresa sostenía. Decir, como dice en la entrevista que pasarán tras el reajuste salarial, o tras indicar unos ingresos brutos de un tercio para los nuevos pilotos, frente a los más veteranos, eso si pasando de volar 650 hasta un máximo de entré 850/900 horas, reafirma la justificación de los argumentos de la empresa. Si ahora es posible volar un avión !un 50% más de horas! hasta por un 50% menos de salario para los segundos recién incorporados, entonces, entonces es cuando hay que precisar el discurso mantenido hasta ahora sobre las FTL, la fatiga y la responsabilidad profesional y justificar ahora su coherencia.