Aviación Digital, Sp.- La compañía Boeing iniciará el desarrollo de dos nuevas variantes estadounidenses del avión E-7 Airborne Early Warning & Control (AEW&C) a través de una Acción Contractual Indefinida por valor de 1.200 millones de dólares.
El E-7 proporciona un nodo de mando y control flexible, totalmente integrado y probado en combate, que proporciona una conciencia multidominio en los entornos operativos más desafiantes. La arquitectura de sistemas abiertos del E-7 y su ágil diseño de software permiten que las capacidades del avión evolucionen y se mantengan por delante de futuras amenazas.
Tal y como afirmó el vicepresidente y director general del programa, Stu Voboril, «el E-7 es una plataforma de eficacia probada. Es el único avión avanzado que ofrece una capacidad de vuelo superior a la de los aviones de combate, capaz de satisfacer las necesidades a corto plazo de las Fuerzas Aéreas de EE.UU. en materia de alerta temprana y control aerotransportados, al tiempo que permite la integración en toda la fuerza conjunta».
El E-7 rastrea múltiples amenazas aéreas y marítimas simultáneamente con una cobertura de 360 grados mediante el sensor MESA (Multi-role Electronically Scanned Array). El MESA proporciona al combatiente un conocimiento crítico del dominio para detectar e identificar objetivos adversarios a larga distancia y se ajusta dinámicamente a las situaciones tácticas emergentes.
Otros operadores del E-7 son la Real Fuerza Aérea Australiana, la Fuerza Aérea de la República de Corea, la Fuerza Aérea Turca y la Real Fuerza Aérea del Reino Unido.
El E-7 utiliza una cadena de suministro bien establecida que reduce significativamente los costes de mantenimiento y logística y aumenta la disponibilidad de la misión desde el primer día. Convertido a partir del 737-700 de nueva generación, el E-7 aprovecha los procesos existentes de diseño, certificación y modificación de aeronaves comerciales derivadas, lo que permite poner en servicio los E-7 para satisfacer las necesidades de las Fuerzas Aéreas.