spot_img
13.3 C
Madrid
marzo, jueves 28, 2024

Seguridad en Trabajos Aéreos

Nuestros monográficos

- Publicidad -spot_img

Sustantivo primordial según la mayoría de aquellos que hablan de la aviación, principio básico con el que salvar la reticencia al vuelo de sus usuarios y pasajeros, es la base del negocio del transporte aéreo.

«A veces hay que «saltarse» la seguridad para poder hacer un trabajo«.

Asturias, SP, 18 de enero de 2016.-

Los pilotos de Trabajos Aéreos somos conscientes de que nuestro trabajo entraña un riesgo. Nadie sabe mejor que un piloto de búsqueda y rescate determinar el punto en que frases como las entrecomilladas y que son ejemplo citado en todo curso de prevención de riesgos laborales como algo fruto de una cultura de inseguridad que hay que abolir, ponen a prueba su personalidad y entrenamiento

«Esto no se puede hacer con seguridad«.

Nadie como un piloto dedicado a cualquier tipo de trabajo aéreo, singularmente a incendios, ha oído y repetido tantas veces la frase anterior; somos conscientes de que nuestro trabajo entraña un riesgo y no pretendemos hacerlo nulo pues para muchos de nosotros lo primordial es poder trabajar y además nos gusta volar. Lo que la profesión y las administraciones competentes han de fijar es «el coste» de poder hacerlo.

Las autoridades de Trabajo y Fomento, competentes en esta materia, pueden encontrar una guía en la propia OACI cuyo tratado hemos suscrito y que establece el concepto de seguridad operacional , en estos términos «Es el estado en que el riesgo de lesiones a las personas o daños a los bienes se reduce y se mantiene en un nivel aceptable, o por debajo del mismo…«

Un nivel aceptable; ese es el punto en el que los pilotos de trabajos aéreos discrepamos de la Autoridad. No estamos dispuestos a asumir que más de 50 compañeros fallecidos en los últimos 12 años sea un nivel aceptable, tal como sí parecen aceptarlo las Sras. Ministras de Fomento y de Trabajo. Y si me dicen que no lo aceptan, entonces ¿qué hacen por evitarlo? Se irá la nada y nada dejará.

Si quien venga no aceptase como asumibles estos niveles de inseguridad, ha de saber que más allá de establecer esos necesarios «procesos continuos de identificación de peligros y gestión de riesgos» que también apunta la OACI, debe restablecer la autoridad del comandante. Algo cuya carencia es común a toda nuestra aviación, transporte incluido.

James Reason de por medio, el comandante es el último filtro llamado a impedir que se produzca un accidente. En la legislación española se le exige toda la responsabilidad a la par que se le deja en la total indefensión cuando pretende asumirla. ¿Grave? mucho ¿Cierto? más.

Aquel comandante que en salvaguarda de sus pasajeros adopte medida que pueda restar operatividad y por tanto rentabilidad a su compañía corre el riesgo, cierto, de ser laboralmente represaliado (Miguel Ángel Gordillo e Iberia son ejemplo paradigmático) . Si es trabajador indefinido, por medio de despido que el juez no podrá otra cosa que declarar improcedente: ergo indemnización y despido. Resto de compañeros habrán aprendido la lección. Si es trabajador eventual: finalizado el contrato no será llamado para el próximo. Resto de compañeros habrán aprendido.

Como esta situación viene de lejos y lleva años repitiéndose, esa última garantía de la seguridad que ofrecería un comandante con libertad de aplicar su criterio profesional sin presión de orden laboral, quedó anulada en muchos casos y en todos cuando la empresa, grupo o asociación es cuasi monopolio.

Aquel comandante, piloto, mecánico o cualquier otra persona conocedora de una falla en el sistema de seguridad que cumpliendo con su obligación legal informe de ello a la Agencia de Seguridad Aérea ha de saber que lejos de ser reconocido por hacerlo, corre el riesgo de ser despedido; siempre hablamos de España. Para mayor información pueden hoy mismo dirigirse a la piloto Silvia Figuerola.

¿Son conscientes autoridades y pasajeros de esta aberración? Pienso que las primeras sí y los segundos no. ¿Hacen algo las autoridades por solucionarlo? Una vez más pienso que las actuales no, pero que las futuras debieran. Si se quiere minorar el riesgo de accidentes es condición sine que non restablecer la autoridad del comandante y garantizar la indemnidad de todos los profesionales del sector.

Es condición necesaria pero no suficiente. La temporalidad que sufrimos los pilotos, y también otros profesionales dedicados a la extinción de incendios nos mata. La temporalidad, además de inseguridad en el trabajo conlleva falta de instrucción y entrenamiento.

En resumen y siempre en mi criterio, para alcanzar un nivel de riesgo aceptable en la lucha contraincendios es imprescindible: Restablecer la autoridad del comandante, garantizar su indemnidad por actos profesionales y asegurar contratos estables.
Quien deba, que actúe.

- Publicidad -spot_img

Más artículos

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Todos los canales

Últimos artículos