WASHINGTON.- La compañía espacial privada estadounidense SpaceX lanzó su sexto lote de 60 satélites Starlink al espacio esta semana, en un esfuerzo por construir como mínimo una red satelital de 12,000 satélites capaz de proporcionar servicios de Internet de banda ancha.
El cohete Falcon 9, que transportaba los satélites, despegó del complejo de lanzamiento 39A (LC-39A) en el Centro Espacial Kennedy de la NASA en Florida a las 8:16 am hora estándar del este (12:16 GMT).
El lanzamiento fue la segunda vez que SpaceX ha vuelto a carga completa. Después de aterrizar en el agua, ambas mitades del carenado del cohete se recuperaron rápidamente, según SpaceX.
Sin embargo, un intento de aterrizar la primera etapa del Falcon 9 en el Océano Atlántico en el dron de SpaceX «Of Course I Still Love You» no tuvo éxito.
El CEO de SpaceX, Elon Musk, dijo que el Falcon 9 experimentó la pérdida de uno de sus nueve motores durante el viaje al espacio, pero aún así pudo entregar sus satélites Starlink en órbita.
«También hubo un apagado temprano del motor en el ascenso, pero no afectó la inserción de la órbita«, tuiteó Musk después del lanzamiento. «¡Muestra el valor de tener 9 motores! Se necesita una investigación exhaustiva antes de la próxima misión«.
La primera etapa de Falcon 9 apoyó previamente la misión Iridium-7 NEXT en julio de 2018, la misión SAOCOM 1A en octubre de 2018, la misión Nusantara Satu en febrero de 2019 y el segundo lanzamiento de Starlink en noviembre de 2019, según SpaceX.
Con un rendimiento que supera con creces el de Internet satelital tradicional y una red global sin límites de limitaciones de infraestructura terrestre, Starlink ofrecerá Internet de banda ancha de alta velocidad a ubicaciones donde el acceso ha sido poco confiable, costoso o completamente no disponible.