Ginebra, SUI.- El transporte aéreo mundial es un contribuyente vital para la economía mundial. En 2019, 4.500 millones de viajeros llegaron a salvo a sus destinos por vía aérea y la carga aérea entregó un tercio del comercio mundial por valor. Esta actividad permitió crear 65,5 millones de puestos de trabajo.
En la lucha contra COVID-19, la industria del transporte aéreo mundial ha estado prácticamente paralizada debido a que los gobiernos cerraron las fronteras y limitaron el movimiento de las personas.
Sin volar, el mundo se ha empobrecido. La pérdida de puestos de trabajo en el sector de los viajes y el turismo es devastadora para las economías. Incontables eventos de negocios o placer han sido perdidos o pospuestos, y la gente ha sido aislada del contacto con la familia y los amigos.
La aviación hará su parte para controlar la propagación de COVID-19. Y nos estamos preparando para restablecer las contribuciones sociales y económicas de la aviación a nuestro mundo reiniciando las operaciones en el momento más seguro posible para hacerlo.
Los directores generales de las aerolíneas que forman parte de la Junta de Gobernadores de la IATA se comprometen a cumplir cinco principios para volver a conectar el mundo por medio del transporte aéreo:
La aviación siempre pondrá la seguridad y la protección en primer lugar. Las aerolíneas se comprometen a trabajar con nuestros socios en los gobiernos, instituciones y en toda la industria para:
▪ Implementar un régimen de bioseguridad basado en la ciencia que mantenga a nuestros pasajeros y tripulación seguros y al mismo tiempo permita operaciones eficientes.
▪ Asegurar que la aviación no sea una fuente significativa para la propagación de enfermedades transmisibles, incluyendo COVID-19.
La aviación responderá con flexibilidad a medida que la crisis y la ciencia evolucionen. Las aerolíneas se comprometen a trabajar con nuestros socios en los gobiernos, instituciones y en toda la industria para:
▪ Utilizar la nueva ciencia y tecnología a medida que esté disponible, por ejemplo, soluciones fiables, escalables y eficientes para las pruebas de COVID-19 o los pasaportes de inmunidad.
▪ Desarrollar un enfoque predecible y eficaz para gestionar cualquier futuro cierre de fronteras o restricciones de movilidad.
▪ Asegurar que las medidas tengan apoyo científico, sean económicamente sostenibles, viables desde el punto de vista operacional, se revisen continuamente y se eliminen o sustituyan cuando ya no sean necesarias.
La aviación será un motor clave de la recuperación económica. Las aerolíneas se comprometen a trabajar con nuestros socios en los gobiernos, instituciones y en toda la industria para:
▪ Restablecer la capacidad que pueda satisfacer las demandas de la recuperación económica lo más rápido posible.
▪ Asegurar que se disponga de transporte aéreo asequible en el período pospandémico.
La aviación cumplirá sus objetivos medioambientales. Las aerolíneas se comprometen a trabajar con nuestros socios en los gobiernos, instituciones y en toda la industria para:
▪ Alcanzar nuestro objetivo a largo plazo de reducir las emisiones netas de carbono a la mitad de los niveles de 2005 para 2050.
▪ Aplicar con éxito el Plan de Compensación y Reducción de Carbono para la Aviación Internacional (CORSIA).
La aviación funcionará con arreglo a normas mundiales armonizadas y reconocidas mutuamente por los gobiernos. Las aerolíneas se comprometen a trabajar con nuestros socios en los gobiernos, instituciones y en toda la industria para:
▪ Establecer las normas mundiales necesarias para una reanudación eficaz de la aviación, en particular aprovechando las sólidas asociaciones con la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
▪ Asegurar que las medidas acordadas se apliquen efectivamente y sean reconocidas mutuamente por los gobiernos.
Estos son los momentos más difíciles. La aviación fue una de las primeras industrias en sentir el impacto de COVID-19. Los enormes paquetes de estímulo gubernamentales han preparado a gran parte del mundo para un impulso económico sin precedentes cuando sea seguro volver a los negocios. Sin embargo, llevará tiempo reconstruir el negocio y la confianza de los consumidores tanto en lo que respecta a la seguridad como a las cuestiones económicas que se necesitarán para que la gente vuelva a volar. Como resultado, es probable que la aviación esté entre las últimas industrias en recuperarse de esta crisis.
La reanudación del transporte aéreo es importante. Incluso mientras la pandemia continúa, se están sentando las bases para una reanudación de la industria mediante una estrecha colaboración de la industria del transporte aéreo con la OACI, la OMS, los gobiernos individuales y otras partes. Sin embargo, queda mucho trabajo por hacer.
Al comprometernos con estos principios, como líderes empresariales de las aerolíneas del mundo, guiaremos la reanudación segura, responsable y sostenible de nuestro vital sector económico. Volar es nuestro negocio. Y es la libertad compartida de todos.