Sevilla, SP, 17 de mayo de 2015.- Paseando por Sevilla, calle San Jacinto, nos sorprendía esta placa que depronto llamó nuestra atención. El 12 de agosto de 1955 Fernando de Juan Valiente, despegaba desde San Pablo, con el prototipo del HA100 «Triana», posteriormente HA200 y HA300. Una procesión, la de la Cruz de mayo, se cruzaba en nuestro camino bajando por dicha calle, mirando al Puente de Triana. Sudario, nuestros fallecidos el pasado 9 de mayo de 2015, y los dos heridos, en la memoria esperando que se recuperen pronto. En pocos países como el nuestro uno se puede topar con una procesión pasando delante de la placa conmemorativa, que nos recuerda que se puede estar bien orgulloso de esta historia aeronáutica de la Hispano Aviación,S.A. que tras esos prototipos se convertirían en el SAETA. Historia del paso del motor de émbolo al de reacción de la industria española, con los dos turboreactores Turbomeca Marboré II en el HA200R. El HA200R1 ya tenía cabina presurizada.
Los países se reconfortan recordando su historia y los héroes que la acompañan. Esa es una de las funciones que la historia tiene como terapia colectiva.
Cuando el pasado se producía el accidente del MSN023 del A400M, pocos españoles conocían el pasado que para la industria aeronáutica de nuestro país, y el auténtico significado que San Pablo en Sevilla, representa. De la Hispano Aviación (antes Hispano Aircraft en Guadalajara), a Construcciones Aeronáuticas S.A., CASA, Airbus Military y ahora Airbus Space&Defense.
Ayer mismo recibíamos la grata noticia de la posibilidad de que la Fuerza Aérea de la India opte por el C295, valorando en estos momentos la adquisición de 56 unidades, más otras 100 unidades de la versión MPA, marítima. Un avión, que junto al C235 constituyen un auténtico éxito de la industria aeronáutica de nuestro país. Aviones de transporte militar, que vuelan ya por casi todos los confines del mundo. México es uno de los principales clientes, India se puede convertir si finalmente se decantan por él, en asociación Airbus S&D con TATA, en el mayor cliente de la historia de nuestra industria.
Sentir orgullo, comprender que desgraciadamente en un vuelo de pruebas puede suceder lo que tragicamente sucedió el pasado sábado. Sudario por la calle San Jacinto pasando delante de lo que fueron las antiguas instalaciones trianeras de Hispano Aviación. El reconocimiento ya casi 60 años después a los trabajadores de la Hispano, debe extenderse a los que el pasado día 9 se dejaron la vida en las proximidades de San Pablo. Ese homenaje perdurará siempre, y servirá aunque sólo sea de mínimo consuelo a los suyos, y de gran motivo para reconfortar a sus compañeros y amigos al encontrar algún atisbo de explicación a su marcha…