La Audiencia de Barcelona ha confirmado que la compañía aérea Ryanair cometió un acto de "competencia desleal" cuando su presidente, Michael O'Leary, amenazó en verano de 2008 con cancelar los billetes vendidos por agencias de viajes 'online', a las que calificó de parásitos que timan a los clientes aplicándoles tasas ocultas.
La confirmación se ha producido después de que Ryanair -que había sido demandada por la agencia 'online' Lastminute- presentase un recurso de apelación contra la sentencia del Juzgado Mercantil número 7 de Barcelona justificando que, aunque las palabras de O'Leary "puedan resultar desafortunadas", no son denigratorias.
La Audiencia de Barcelona ha asegurado en su resolución que el precio cobrado por las agencias no es injustificado como sostenía el presidente de Ryanair, sino que "es el precio por un servicio realizado" del que los clientes son conscientes cuando acuden a estas páginas en lugar de hacerlo directamente a la de la compañía aérea.
Después de haber hecho estas amenazas, la compañía aérea irlandesa incluyó en su página web que "todas las reservas de vuelos Ryanair han de realizarse directamente" a través de la misma o de su centro de llamadas.
Precisamente, este es el único punto que la Audiencia de Barcelona ha admitido del recurso presentado por Ryanair, que podrá seguir publicando en su web esta cláusula sin perjuicio de que las agencias de viajes 'online' sigan intermediando en la venta de billetes.