Tres meses y medio. Ese es el plazo máximo que la dirección de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) está dispuesta a conceder a los 2.400 controladores aéreos para que acepten rebajarse el sueldo y faciliten la profunda transformación del actual modelo aeroportuario avanzado ayer por el ministro de Fomento, José Blanco en el Congreso de los Diputados. PINCHA AQUI para ver artículo completo.
A partir del mes de mayo los salarios mensuales que percibe el colectivo de controladores deberán aproximarse paulatinamente a la media europea. Junto a esta máxima, tendrán que comprometerse a elevar la productividad media, una de las más bajas de Europea, según expuso el ministro a sus señorías.
Sueldos de 334.000 euros
José Blanco aprovechó su comparecencia ante la Comisión de Fomento para cumplir con la reciente amenaza de detallar el sueldo de los controladores, cuya media se sitúa en 334.000 euros anuales, frente los 110.000 de un funcionario francés, los 158.000 euros de un profesional alemán, o los 120.000 euros de un inglés. Según los datos correspondientes al ejercicio 2008, un total de 713 controladores ganaron ese año entre 360.000 y 540.000 euros, otros 135 percibieron más de 600.000 euros y 28 ingresaron más de 700.000 euros.
En un tono más severo Blanco precisó que un controlador había llegado a cobrar 900.000 euros gracias al elevado número de horas trabajadas. "No estoy dispuesto a mantener esta situación. No podemos pagar a precio de oro las horas extras de los controladores", apostilló.
El ministro gallego culpó a los controladores del déficit de 300 millones de euros que arrastraban los servicios de navegación aérea al cierre de 2009, así como de las elevadas tasas que pagan las compañías aéreas. Según sus datos, éstas son un 48% superiores a la media de los países que forman Eurocontrol (84 euros), más del doble de las que cobran Grecia, Túnez y Marruecos (72 euros), y casi el triple que las de Turquía, países todos ellos que compiten con España en el turismo a gran escala.
Las horas extra, caballo de batalla
En un encuentro con los medios el presidente de Aena, Juan Ignacio Lema, mostró su disposición a estirar como máximo la negociación del nuevo convenio colectivo hasta el mes de mayo, entre otras razones porque en abril expira el vigente acuerdo de horas extras. Este concepto es precisamente el gran caballo de batalla de la negociación retomada con el sindicato USCA, porque supone el 50% del sueldo de cada controlador. Si el coste por hora de un controlador asciende a 184 euros, la hora extraordinaria media representa 423 euros.
Aena pretende que la jornada anual de cada controlador pase de las 1.200 horas actuales a un rango de 1.500/ 1.600 horas fijas, de forma que las horas extras desaparezcan completamente. El segundo elemento de choque está relacionado con la organización del trabajo. Según Lema, con el modelo actual los controladores disponen de plenos poderes para alterar la organización de los turnos diseñados por Aena con tres meses de antelación.
El deseo del ente público es recuperar la capacidad de gestión y eliminar las incidencias de última hora no justificadas. El presidente de Aena desmintió que Usca halla propuesto negociar la masa salarial del colectivo a la baja (180 millones). Según dijo, la propuesta del sindicato sólo ahorraría 20 millones de euros.