Valencia, SP, 1 de junio de 2015.– Los de la «casta» de los pactos políticos en la Comunidad Valenciana, y en otras tantas desplegadas por la piel de toro, deberán, entre otras cosas ver si lo presuntamente sucedido entre el Delegado del Gobierno, y directivos del operador AVIALSA es una excepción, o es la regla, en lo que se refiere al estricto cumplimiento de requisitos técnicos a la hora de adjudicar o no los megacontratos de extinción de incendios en España. No estaría de más que se comenzase por el principio como es el cumplimiento o no, y en su caso, las penalizaciones cobradas o no por esos incumplimientos. AESA, que es quien supervisa, tambien en Valencia, los cumplimientos desde el punto de vista de la aeronavegabilidad, licencias, etc… tambien se debería pronunciar, más aún sabiendo el miedo a las represalias que muy probablemente impida una notificación con garantías en España. SPPLB, sindicato que aglutina a policías locales y bomberos en Valencia denunciaban recientemente que las brigadas contra incendios en esa provincia no contaban con apoyo aéreo, debido a la escasez de medios, y las contínuas averías del único helcóptero. Del 15 de diciembre de 2014, al mes de marzo de 2015, han sido 5 las averías del único helicóptero para transporte de la brigada de emergencias e incendios. ¿Casual? Dos de esas averías se producían al ir al entrar en operación, con lo que los servicios no se pudieron realizar.
Las otras tres averías surgieron cuando el helicóptero procedía a realizar vuelos de entrenamiento. Hasta 8 habrían sido el número de averías surgidas hasta el día de hoy en este período de tiempo. Toda una tendencia…
El pasado año el famoso KAMOV, coaxial, sufrió tambien una avería en el bambi, sin tener repuesto almacenado para su sustitución, y no pudo volver al incendio en el que intervenía -creemos recordar que era en Alicante-. Esto logicamente tendría que haber sido penalizado por las autoridades, aunque no tenemos a día de hoy constancia de ello.
Algunas fuentes señalan que tampoco se cumplen los requisitos del pliego sobre la capacidad de descargas. Se estrangula la capacidad de carga de agua al 80% nos han indicado algunas de estas fuentes, en helicópteros con capacidad de 1.300 según el pliego, o en el caso del KAMOV con un bambi de una capacidad teórica de 5000 lts. que normalmente no llega a descargar los 4500.
Tambien tienen por esa Comunidad Valenciana un helicóptero de apoyo, «refuerzo», a la coordinación que tambien según el pliego debería tener capacidad para tirar como mínimo 500 lts., pero que no suele hacerlo, así como tampoco suele relevar esa coordinación, que lo hace el de la policía autonómica, con lo que al no operar está casi como un helicóptero «decorativo» pero gravoso para las arcas públicas de la Comunidad, nos señalan. Vamos un auténtico Reino de Taifas, que los exultantes nuevos gobernantes deberán fiscalizar al detalle hasta encontrar si se tratan de excepciones o de normas estas formas de cumplir con los requisitos exigidos, y en caso de incumplimientos, si se han materializado las correspondientes sanciones indicadas en dichos pliegos.