Miguel Gutiérrez / Aviación Digital, Sp. Los múltiples problemas de seguridad que Boeing ha experimentado en los últimos meses ya están teniendo repercusión en las cuentas del fabricante. Brian West, director financiero, asegura que esperan una fuga de unos 4.150 millones de euros en el primer trimestre del año.
Repercusión económica de los incidentes
El flujo de caja libre no superará los 10.000 millones de dólares en el presente año. Además, los márgenes de negocio de la compañía serán negativos entre los meses de enero y marzo en un 20%. Boeing se ve obligado a pagar indemnizaciones por el accidente del pasado 5 enero de un vuelo de Alaska Airlines (Boeing 737 MAX 9) en el que se desprendió una puerta. El accidente dejó una docena de heridos.
Turbulencias para el fabricante
La empresa no solo hace frente a un desplome económico. También sufre la inmovilización de 171 de sus aviones y la limitación de producción del 737 por parte de los reguladores a raíz de los recientes incidentes. Esto repercutirá en las tasas de producción que serán menores, al menos, en el primer semestre de 2024. Boeing calcula que será capaz de producir 38 unidades del 737 MAX mensualmente. El principal competidor, Airbus, afirma que los problemas de Boeing «no son buenos para la industria» pero aprovecha el mal momento del fabricante americano para sacarle ventaja. Airbus producirá 79 aviones mensuales, 34 más que Boeing. 408 aeronaves más al terminar 2024.
Los problemas de seguridad de Boeing
Los casos se amontonan. El más sonado: el desprendimiento de una puerta en un vuelo de Alaska Airlines (Boeing 737 MAX 9).
Un avión de United Airlines (Boeing 777) perdió una rueda en pleno despegue en San Francisco y se vio obligado a realizar un aterrizaje de emergencia.
El más reciente es el caso de un avión de Delta Airlines (Boeing 737) al que le explotó un motor en un trayecto Aruba-Atlanta. El piloto se vio obligado a hacer un aterrizaje de emergencia al poco tiempo de despegar:
La Administración Federal de Aviación estadounidense ha sometido a Boeing a una serie de exámenes. La compañía no pasó las pruebas. Suspendió 33 de las 89 tests. Se identificaron 97 incidentes en el proceso. El proveedor Spirit Aerosystems también falló 7 de los 13 tests y se identificaron malas prácticas como el “uso de jabón para platos como lubricante”.
Otros problemas: causa penal y el caso Barnett
Las coyuntura económica y productiva no son los únicos problemas. El Departamento de Justicia de Estados Unidos investiga penalmente a Boeing por los accidentes. A esto se suma la polémica por la repentina muerte por supuesto suicidio de John Barnett, un extrabajador crítico con las supuestas malas prácticas del fabricante. Llevó a juicio a Boeing pero nunca llegó a declarar. El exjefe de calidad de la planta de North Charleston dijo en un vídeo: «si me pasa algo, no fue un suicidio».