Claudia C/ Aviación Digital, Sp.- En un mundo donde la aviación moderna enfrenta desafíos cada vez más complejos, la comunicación eficiente y segura se ha convertido en un pilar fundamental para garantizar la seguridad de los vuelos. Sin embargo, existen grandes extensiones de nuestro planeta, como los océanos o regiones remotas, donde las comunicaciones y la vigilancia aún presentan lagunas preocupantes.
Es en este contexto que surge STARTICAL, un ambicioso proyecto impulsado por ENAIRE e Indra, que promete revolucionar la manera en que las aeronaves se comunican y son monitorizadas en cualquier rincón del mundo, incluso en las áreas más inaccesibles.
🛰️ #STARTICAL es una iniciativa conjunta de @IndraCompany y @ENAIRE destinada a lanzar una constelación de satélites para proporcionar servicios de #vigilancia y #comunicación en áreas remotas y oceánicas.
— ENAIRE (@ENAIRE) September 4, 2024
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Un proyecto que rompe barreras
Presentado recientemente en la Conferencia de Navegación Aérea de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) en Montreal, STARTICAL es una propuesta que va más allá de ser una simple mejora técnica. Este sistema, basado en la utilización de una constelación de satélites en órbita baja, tiene la capacidad de ofrecer servicios de comunicación VHF satelital y vigilancia ADS-B en regiones donde hasta ahora no era posible.
Con un alcance global, STARTICAL pretende poner fin a una de las barreras más antiguas en la aviación: la falta de cobertura en espacios remotos. Tal como lo explicó Juanjo Cornejo, Director de Desarrollo de Negocios de ENAIRE, el proyecto nace de la necesidad de superar los límites que impone la infraestructura terrestre. «El problema que afrontamos en la aviación global es la falta de infraestructura en áreas oceánicas y remotas, donde la comunicación y vigilancia actuales son limitadas o inexistentes,» aseguró Cornejo.
Asimismo, este proyecto no es solo una evolución natural de la tecnología aeronáutica; es una apuesta por un futuro donde todas las aeronaves, sin importar su ubicación, puedan mantener un nivel de seguridad y eficiencia comparable al que experimentan en los espacios aéreos más congestionados del mundo.
Tecnología que ya está en el aire
Uno de los grandes méritos de STARTICAL es su enfoque pragmático: no requiere cambios drásticos ni costosos en las aeronaves actuales. Al aprovechar la tecnología de comunicaciones VHF que ya está instalada en la mayoría de los aviones comerciales, este sistema elimina la necesidad de modificar los equipos de las aerolíneas o de someter a los pilotos a nuevas certificaciones.
La genialidad de STARTICAL radica en que, a pesar de su complejidad tecnológica, para los operadores de aeronaves su implementación será prácticamente invisible. «La tecnología VHF ya es universal en la aviación. STARTICAL simplemente, traslada esa tecnología existente al espacio,» subrayó Cornejo durante su presentación. Este enfoque minimalista, pero altamente eficiente, es lo que lo convierte en un avance tangible y accesible para la industria.
Una alianza de altura
El proyecto STARTICAL es posible gracias a la colaboración entre ENAIRE e Indra, dos gigantes de la tecnología aeronáutica que han sabido combinar su experiencia y conocimientos para dar vida a una solución integral. ENAIRE, como proveedor de servicios de navegación aérea de España, aporta su profundo conocimiento del sector y de las necesidades operacionales. Por su parte, Indra, con su dilatada experiencia en tecnología y defensa, ha sido el socio perfecto para integrar capacidades de vigilancia avanzada y garantizar que el sistema funcione con la precisión y fiabilidad que exige el sector.
Además, uno de los componentes más notables de STARTICAL es la incorporación de la tecnología ADS-B para la vigilancia de aeronaves. Esta capacidad permitirá el seguimiento en tiempo real de los vuelos en cualquier parte del mundo, un salto cualitativo en la forma en que se gestiona la seguridad aérea. Este tipo de tecnología es crucial, ya que proporciona un control exhaustivo y, sobre todo, continuo, incluso en zonas donde antes era impensable mantener una conexión constante con las aeronaves.
Un horizonte global y sostenible
El impacto de STARTICAL no se limitará a mejorar la seguridad aérea. Este sistema también traerá consigo beneficios medioambientales significativos, lo que lo convierte en una pieza clave en el objetivo global de hacer la aviación más sostenible. Al permitir que las aeronaves vuelen rutas más optimizadas y directas, STARTICAL reducirá el consumo de combustible y, con ello, las emisiones de CO2.
Este enfoque es un gesto responsable hacia el planeta y también una respuesta a las demandas de la industria para avanzar hacia la neutralidad de carbono. STARTICAL promete, en este sentido, contribuir activamente a una aviación más ecológica y eficiente, al mismo tiempo que impulsa la seguridad operacional a nuevos niveles.
Como afirmó Cornejo: «Esta solución no solo mejora la operatividad, sino que también reduce el impacto medioambiental.» Y en un mundo donde la sostenibilidad es una prioridad creciente, estas características hacen que el proyecto no solo sea una mejora tecnológica, sino una respuesta a las exigencias éticas del sector.
Hacia el futuro de la aviación
Aunque STARTICAL aún se encuentra en fase de desarrollo, el proyecto ya ha logrado importantes avances regulatorios, lo que lo acerca a convertirse en una realidad operativa. La aprobación de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) para el uso de frecuencias aeronáuticas desde el espacio es solo el comienzo. Asimismo, la OACI está trabajando en la actualización de los Anexos 10 y 3 para incluir los procedimientos necesarios que permitirán que estas frecuencias se utilicen de manera efectiva en la navegación aérea.
El lanzamiento de los primeros satélites está previsto para 2025, como parte del proyecto ECHOES y si todo sigue según lo planeado, STARTICAL podría estar completamente operativo para 2030. «Estamos viendo el futuro de la navegación aérea. El horizonte de 2030 no está tan lejos,» concluyó Cornejo, refiriéndose al objetivo de ofrecer servicios operativos completos a finales de la década.
El legado de STARTICAL
Lo cierto es que STARTICAL no es solo un proyecto tecnológico; es una visión de lo que puede ser la aviación global en el futuro cercano. En un mundo cada vez más interconectado, donde las distancias se acortan y las demandas de seguridad y sostenibilidad crecen, este sistema representa un paso crucial hacia una aviación verdaderamente universal.
La promesa de una comunicación y vigilancia global, que elimine las diferencias entre el espacio aéreo continental y oceánico, abre las puertas a una nueva era en la que la seguridad y la eficiencia no estarán limitadas por la geografía.
STARTICAL, con su constelación de satélites, marcará el cielo como nunca antes.