Barcelona, SP, 17 de junio de 2015.- Los directivos de Vueling se empeñan en que la prensa les agasaje con un buen titular, más aún, cuando mañana habrá Junta de Accionistas de Vueling. La realidad es profundamente distinta, y las artes albionas parece que son el método empleado en esta teórica negociación con sus pilotos. La exultante nota de la Dirección de ayer, retrae lo planteado por los pilotos a lo que ya expusieron hace tres meses. «3 meses hemos ganado» deben estar pensando en algún despacho de la Dirección de Vueling. Pero después de verbalmente hace tres meses, decir que les parecía muy bien las propuestas, nuestras fuentes nos indican que sacaron un conejo de su británico bombín, e impusieron unas condiciones sin acuerdo de la Sección Sindical de la compañía, a pesar de que hay un texto escrito, el art.7.9 del Convenio Colectivo que les obliga a ello. Ante semejante comportamiento y talante, los pilotos además de estar que trinan, sienten, perciben, que todo esto está siendo una tomadura de pelo al más puro estilo de Mr. Bean. Algo así como invitarles a tomar el té de las cinco, a las cinco de la mañana. Típica forma de negociar en la Gran Bretaña. Además el próximo lunes habrá Asamblea de pilotos, y con la temporada alta, ya se sabe… ¿Qué tipo de SSMM impondrán a estos pilotos?… los de España, los de Italia, o los de la Gran Bretaña…, en caso de huelga. La crisis ya no se circunscribe en Vueling simplemente a las bases deslocalizadas, con bandera italiana. La cosa va mucho más allá, y tiene toda la pinta de recrudecerse.
Vueling no tiene, según algunos afectados, la intención de dar una solución global a un problema que ya es global dentro de la compañía. Ese problema es simple y llanamente el haber pasado la línea roja de la precarización empobrecedora de tripulaciones que trabajan duramente, han sido honestas en los duros momentos que ha pasado la compañía, y ahora, que parece que los números empiezan a cuadrar, sienten sobre su cuello otro nuevo apriete de los grilletes. Grilletes que tienen olor a la herrumbre londinense.
Vueling, busca solucionar lo que les apremia, como son las bases en Italia, pero no dar una solución global a los problemas que la compañía arrastra con sus tripulaciones.
El Sr.Val de Vueling, hablaba de «acercamiento» con sus pilotos, pero éstos desconocen a qué se refiere. Y esto, antes de que llegue al V1, no retorno en la negociación, deberían hacérselo mirar muy mucho en esta compañía, puesto que no parece estar el horno para bollos, ni para panettonnes, ni para cakes…