Guadalajara, SP, 3 de junio de 2013.– Si algo ha de aprender nuestra desprestigiada CIAIAC, es a mejorar en la calidad de sus Informes sobre accidentes e incidentes, huyendo caer en la simplificidad y el facilismo de las causas probables, que habitualmente señalan a la tripulación técnica, a los pilotos, como determinante de del desenlace fatal que es un accidente. Con estos prejuicios, en muchas ocasiones, de partida, en el Informe de este accidente de helicóptero investigado por la NTSB, nunca se habría llegado en nuestro país, al profundo análisis, de libro, que se hace en este informe final, y se habría llegado, pecando de una simpleza alarmante para aquellos que creen que la cultura de seguridad debería trascender a las "aparentes evidencias", que el factor desencadenante ante la pérdida de potencia por quedarse sin combustible, podría ser la distracción del piloto por el uso no operacional de un dispositivo electrónico durante la fase de vuelo y operación en tierra. Nada más lejos de conformar a la NTSB. Adjuntamos el Informe Final.
El exhaustivo informe se compone de 53 pagínas. Cómo es lógico llega a unos "hallazgos" que determinan la causa probable. La causa probable, como en todo accidente es compleja. Las recomendaciones finales son profundas y van más allá de lo evidente. Efectivamente es evidente que el piloto se distrajo con la utilización de dispositivos móviles en este helicóptero medicalizado. Esta distracción hizo que no se percatase de que se iba a quedar corto de combustible, como así fue. Pero hay que trascender a lo evidente para determinar todas aquellas causas que hicieron "posible" este accidente con resultado fatal. Para corregir todas las amenazas posibles, y llegar a evitar nuevos accidentes donde estas causas estén presentes.