Málaga, SP, 25 de abril de 2014.- Pocas semanas después de la emisión del Auto por el Juzgado de Instrucción nº3 de Madrid, en el que se requería a las partes para la calificación de los hechos del 3D2010, la Fiscalía de Málaga ha solicitado el archivo de la causa abierta por esos mismos hechos. De nuevo se incide en el argumentario que no hubo abandono masivo del servicio, y por lo tanto, el Fiscal, considera la inexistencia de delito. Este agónico proceso, que lleva ya instruyéndose durante más de 3 años y medio casi, es la irrefutable prueba de que las actuaciones judiciales erraron en el señalamiento de las personas jurídicas causa primigenia del cierre del espacio aéreo español. Si se hubiern dirigido las miradas al punto adecuado, Fomento, Aena y Navegación Aérea, y sus responsables máximos, muy probablemente ya estarían juzgados estos hechos. Sin olvidar la dudosa legalidad de la militarización y declaración del Estado de Alarma. Algo que en un país democrático ya habría dirimido las responsabilidades penales y/o civiles, a las que hubiere lugar.
Si por un lado la Fiscalía según informa EP basa su petición de archivo en un documento de la Jefa de Torre del aeropuerto malagueño, que podría ser considerada como parte involucrada o afectada, en el sentido de que niega que los controladores de servicio ese día abandonaran dicho cometido, "ya que cuando alegaron incapacidad (impreso 34.4) fueron enviados al servicio médico del aeropuerto y asistidos allí, estaban cubiertos por sus compañeros, ajustando los períodos de descanso", algo que "los propios informes de asistencia hacen constar", la posible duda queda disipada por el informe de la propia AENA. Según la Fiscalía, en él, un informe por cierto del propio Director Regional de Navegación Aérea Sur, se señala que "claramente ningún vuelo previsto esos días en el aeropuerto de Málaga fue cancelado o desviado a consecuencia de la situación de los controladores del aeropuerto malagueño", insistiendo en que el funcionamiento de la dependencia fue "correcto".