Madrid, SP, 29 de enero de 2014.- La directora del mayor aeropuerto de España, Madrid-Barajas, Elena Mayoral, intenta imponer la sensatez en el ámbito de la notificación de sucesos o incidentes aéreos, de los que los trabajadores tengan constancia, instándoles a la notificación. Los términos en los que se lo comunica a los trabajadores del aeropuerto distan mucho de los explicitados en el Expediente y posterior sanción al trabajador y Coordinador de Planficación y Operaciones de Palma de Mallorca. Mayoral hace referencia al último Boletín de Seguridad Operacional, donde por parte del aeropuerto que dirige tiene como principal objetivo "la gestión de cualquier hecho que pueda constituir un riesgo para la operación segura de aeronaves". No es necesario decir mucho más, pero añade en su comunicado "no subestimes la importancia de tus sugerencias, !COMUNICA SIEMPRE!". Además solicita en este adecuado tono la colaboración de todos los trabajadores en esta labor como es la de "mantenimiento de los más altos niveles de Seguridad Operacional".
El tono de su notificación es el reflejo de, según nos consta, la actitud y las formas que rigen en la gestión de Mayoral. Allá donde ha estado, Ibiza, Valladolid o Santander, se ha distinguido precisamente por ser una persona dialogante y bastante razonable. De buen trato y sobre todo, lo más importante, una austera gestora de lo público, que se ha encontrado con una labor complicadísima ante la situación del Ente en los aeropuertos, especialmente con la caída del tráfico aéreo en Barajas, está intentando por todos los medios reconducir la situación de esta faraónica infraestructura heredada, empleando la imaginación e intentando la colaboración de los trabajadores del aeropuerto, que seguro piensa sinceramente, que es esencial para conseguir un crecimiento que en estos momentos resulta ciertamente complicado. Su conciliador escrito en un momento en el que están saltando chispas por los cuatro costados de AENA con motivo del expediente y sanción impuesta al trabajador de Palma, resulta absolutamente necesario para que se vuelva a imponer la sensatez en las relaciones que afectan a lo más sagrado que tiene la aviación. La safety.
