Guadalajara, SP, 22 de julio de 2014.-El guitarrrista norirlandés Gary Moore publicaba en 1983 un disco, tras el derribo del avión de pasajeros de Korean Air Vuelo KAL007, por aviones militares de la Unión Soviética, que causó la muerte de forma cobarde, a sus 269 ocupantes. Entre todos ellos tambien la hija de Hans Ephraimson, Alice, al que le dedicamos la VII Edición de nuestro Premio de Periodismo Aeronáutico, en AD como homenaje póstumo por su búsqueda de la verdad. El tema "Murder in the Skies" está especialmente dedicado a esta forma de terrorismo (de Estado) como es el derribo de un avión civil con armas militares. Entonces, en 1983, se estaba en plena Guerra Fría. Tras el Asesinato en el Aire, del vuelo MH17 el pasado jueves por un misil ruso de nuevo no se llamaba a este suceso por su auténtico nombre. El entonces presidente de los EEUU decía tras el asesinato múltiple de los 269 civiles del KAL007 que se trataba de "un crimen contra la humanidad que nunca debe ser olvidado" y "un acto de barbarismo, brutalidad inhumana y cobarte". El diario EL PAIS titulaba entonces "Perdido un Boeing 747 surcoreano con 240 personas a bordo". Ni se había "perdido", ni a bordo había 240 personas a bordo sino 269… ABC el día 2 hablaba de "tremendo asesinato colectivo" Dos muestras de cómo se titulaba en España este trágico suceso entonces.
Llama la atención cómo se aborda un mismo hecho objetivo, el derribo por un misil de un avión de pasajeros en vuelo, editorialmente. Vaya en defensa del periodismo que en los primeros momentos de un salvaje acto, se desconocen toda una serie de pormenores, y se debe ser muy cauto a la hora de titular.
Pero tambien está por otro lado la obsesiva importancia que se le da a la "exclusiva" adelantada por un medio u otro, como símbolo de prestigio e implantación global de ese medio. La exclusiva es una forma de "sacar pecho" que tienen los medios (no nos incluímos en este caso se lo aseguro), pero en ocasiones les gastan malas pasadas, y lo peor de todo, es que infringen un daño que se graba profundamente el alma de los afectados directos, y que los psicólogos calificarían como la "primera imagen" que prevalecerá en el sujeto probablemente para siempre.
A nivel de mass media, sucede algo parecido. En el caso que nos ocupa, el MH17, el debate público se establecía desde el primer momento, hasta que Obama comenzó a aseverar algo que intuíamos como más probable, que el derribo se hubiera causado por la milicia irregular Pro-rusa, dado que resulta, en principio menos probable que lo fuera por un Ejército regular ya sea ruso o ucraniano. En este último caso indudablemente aún resulta menos plausible para la causa de Ucrania.
En medio de todo esto depronto, en medio de la incertidumbre caótica informativa de los primeros momentos, recibíamos, como suele suceder en nuestra redacción informaciones bastante poco contradictorias, y bastante poco fiables. Por ejemplo las redes sociales, y en el ejemplo que les pongo concretamente Twitter. Un tal @spainbuca, que pone "Carlos" como nick, colgaba los siguientes mensajes (aparentemente se trataba de un controlador aéreo español trabajando en Kiev, Ucrania):
Aparentemente se trataba de información de primera mano, desde Kiev en Ucrania, y ya veíamos como un medio de comunicación RT, estaba sobre la pista de la noticia. ¿Qué hacer?. Logicamente intentar contrastar y contactar con la fuente. Así lo hicimos…
Obsérvese como ya el periodista intuye "… si todo lo que estás diciendo es así"
A la mañana siguiente resultaba ya imposible contactar con el supuesto controlador español en Kiev "Carlos":
En definitiva finalmente se descubrió lo siguiente, tras por ejemplo el medio prorruso RT, sí reproducir en su web los tweets de "Carlos".
Esto les puede dar una idea de lo "complicado" que ante una situación de crisis puede resultar filtrar las informaciones. Por este motivo exactamente, es por el que la "exclusiva" en numerosas ocasiones tiene que esperar necesariamente a que esos datos inconexos se conviertan en información contrastada. Es preferible dar la noticia algo más tarde, pero que sea una noticia, en lugar de una especulación interesada, como era el caso. Esas especulaciones, aparte de no ajustarse a la veracidad, en el caso de los familiares y afectados por este acto terrorista, podrían hacer un daño irreparable. Esto tambien entra en la deontología de cada medio. Poner por encima la "exclusiva", o el daño que se puede infringir… Cada uno decide y elige. Además está la cuestión del material gráfico que no contribuye a informar, y no es necesario que sea explícito sobre todo desde el punto de vista del derecho a la intimidad de víctimas y familiares.
De ahí el titular, simple y llanamente basado en los hechos factuales del derribo de un avión comercial por un misil en una zona de conflicto. Se trata sólo de eso de un Asesinato en los Cielos… Lo dice todo.