Aviación Digital, Sp. – El sindicato de controladores aéreos USCA ha expresado su profunda preocupación por las crecientes presiones que algunas aerolíneas están ejerciendo sobre estos profesionales, destacando en particular a Ryanair. Según USCA, estas situaciones podrían poner en riesgo la seguridad aérea, un tema de vital importancia para la industria de la aviación.
USCA denuncia presiones por parte de algunas compañías sobre los @controladoreshttps://t.co/pX5TKrmIzP pic.twitter.com/Hoa19uQ08P
— USCA CONTROLADORES🎧 (@USCAnet) September 27, 2024
Además, ha solicitado la intervención de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) y del Ministerio de Transportes para que se tomen medidas urgentes y se eviten futuras interferencias que puedan comprometer el trabajo de los controladores.
Un incidente reciente con Ryanair en Palma de Mallorca
El caso más reciente que ha generado alarma ocurrió el pasado 15 de agosto, cuando Ryanair cuestionó públicamente la labor de los controladores aéreos del aeropuerto de Palma de Mallorca durante el paso de una Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) por el Mediterráneo. En medio de una situación de clima extremo, con fuertes vientos y condiciones meteorológicas adversas, la aerolínea sugirió que las decisiones de los controladores para bloquear las operaciones de aterrizaje no estaban justificadas, afirmando que mientras algunos aviones despegaban, los suyos no podían aterrizar. Esta declaración fue hecha a pesar de las advertencias de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) sobre los riesgos meteorológicos en la zona.
Ryanair fue más allá al intentar comunicarse directamente con los responsables de la torre de control para revertir la decisión, una acción que, desde la perspectiva de los expertos en control aéreo, pone en duda la prioridad de la seguridad y la independencia en la toma de decisiones técnicas por parte de los controladores. Para USCA, este tipo de situaciones suponen una presión indebida sobre los profesionales que tienen la responsabilidad de garantizar que los vuelos se desarrollen de manera segura, sobre todo en situaciones meteorológicas complicadas.
El papel de los controladores aéreos en la seguridad
Los controladores aéreos son uno de los principales pilares de la seguridad en el espacio aéreo. Su trabajo es coordinar y dirigir el tráfico aéreo, asegurándose de que cada avión que entra y sale de los aeropuertos lo haga de manera ordenada, sin poner en riesgo a los pasajeros, tripulantes y demás aeronaves. Cualquier decisión tomada por un controlador está basada en un análisis profundo de la situación, que incluye el estado del tiempo, la cantidad de aviones en el espacio aéreo y las condiciones del aeropuerto. Estas decisiones no son arbitrarias, sino que responden a protocolos establecidos internacionalmente, diseñados específicamente para preservar la seguridad de todos los involucrados.
Es en este contexto donde las acusaciones de aerolíneas como Ryanair pueden resultar especialmente preocupantes. La presión para modificar decisiones tomadas en favor de la seguridad representa un conflicto entre los intereses comerciales y la operativa segura de los vuelos. USCA subraya que, en ningún caso, la presión comercial de una compañía debería influir en el trabajo de los controladores.
Precedentes de Ryanair y preocupaciones históricas
Este no es el primer enfrentamiento entre Ryanair y los controladores aéreos. La aerolínea ya ha sido objeto de investigaciones en el pasado, en particular por su política de combustible. En 2010 y 2012, Ryanair protagonizó incidentes en los que varios de sus aviones se vieron obligados a declarar emergencias por falta de combustible, una situación que llevó a la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (CIAIAC) a emitir un informe señalando la “inadecuada previsión del consumo de combustible” como un factor contribuyente en estos sucesos. El informe dejó en claro que la política de minimización de combustible que sigue Ryanair puede generar situaciones de riesgo. Esto añade una dimensión adicional a las preocupaciones actuales de los controladores, quienes ven un patrón en las prácticas de esta aerolínea que podría comprometer la seguridad aérea.
Reacción de USCA y las solicitudes a las autoridades
Ante esta situación, USCA ha hecho un llamamiento tanto a la AESA como al Ministerio de Transportes para que tomen cartas en el asunto. El sindicato pide que se implementen mecanismos de vigilancia y sanción para evitar que este tipo de presiones por parte de las aerolíneas continúen. Asimismo, proponen que se revisen los protocolos de comunicación entre las compañías aéreas y los controladores, garantizando que se mantenga la independencia de estos últimos en la toma de decisiones relacionadas con la seguridad.
El sindicato es enfático en señalar que cualquier injerencia externa, ya sea por motivos comerciales o de otro tipo, debe ser rechazada en favor de la seguridad operacional. En palabras de USCA, «los controladores aéreos no son un obstáculo para la eficiencia de las operaciones, sino los garantes de que esas operaciones se realicen de manera segura y sin incidentes».