Cartagena, SP.- El Aeropuerto Internacional de Corvera en Murcia pasará a denominarse «Juan de la Cierva Codorniú» en reconocimiento al inventor español nacido allí. El impulso que le está dando la Asociación Juan de la Cierva Codorniú, capitaneado por la bisnieta del ilustre ingeniero e inventor, Laura de la Cierva, está comenzando a dar sus frutos, y ha contado con la sensibilidad de Ciudadanos en aquella Comunidad Autónoma que es quien ha desarrollado razonadamente esta propuesta. La Asociación ha puesto en marcha el proyecto para volver a poner en vuelo el C30, así como numerosas iniciativas como una Exposición deambulante sobre su figura, que visitará distintos lugares de España, y posteriormente viajará al extranjero nos informan.
PROPUESTA PARA DENOMINAR AL AEROPUERTO DE CORVERA COMO «AEROPUERTO INTERNACIONAL JUAN DE LA CIERVA Y CODORNIÚ»
Juan de la Cierva y Codorniú, inventor del Autogiro, nació en Murcia en 1895 y jamás olvidó sus raíces, llevando el nombre de Murcia allá por donde realizaba sus demostraciones aeronáuticas.
Genial ingeniero e inventor del Autogiro, creador de numerosas iniciativas empresariales e industriales, científico impulsor de la Aviación española. Hijo de Juan de la Cierva Peñafiel, un célebre empresario, abogado, político conservador y cinco veces ministro en el gobierno del reinado de Alfonso XIII. De la Cierva Peñafiel ocupó la alcaldía de la ciudad de Murcia y el cargo de gobernador Madrid.
Juanito, como así le llamaban en casa, desde su infancia mostró gran interés por la naciente aeronáutica, especialmente desde que quedó fascinado ante la explicación de por qué volaba un avión, ofrecida por su abuelo Ricardo Codorniú Stárico, quien repobló los bosques de Sierra Espuña.
La creación del Autogiro por el ingeniero murciano Juan de la Cierva y Codorniú, va mucho más allá de la simple invención de un nuevo tipo de aeronave, cuyos principales valores son la seguridad de vuelo.
Cuando Juan de la Cierva consiguió volar por primera vez el Autogiro en el año 1923,existían solo en los Estados Unidos unas 400 empresas dedicadas a la invención del helicóptero.
Solo una persona concibió y construyó un Autogiro. Pero Juan de la Cierva tenía una capacidad excepcional, y fue superando, uno tras otro, todos los problemas técnicos que aquejaron a los primeros prototipos e impulsó el desarrollo del Autogiro hasta llevarlo a su mayoría de edad en el transcurso de apenas una década. Sus Autogiros eran capaces de despegar y aterrizar en apenas una decena de metros, ascender con soltura, maniobrar con agilidad sorprendente y evolucionar a velocidades extremadamente reducidas y alcanzar velocidades de crucero superiores a 160 km/h.
Mientras tanto los helicópteros fueron evolucionando hasta máquinas que por fin eran capaces de aterrizar y despegar verticalmente, ascender a unos pocos metros de altura, desplazarse a velocidades de unos 15 km/h y con unos niveles de fiabilidad y eficiencia muy deficientes. Solo cuando Pescara primero y Focke después utilizaron el rotor del Autogiro en sus rotores, el helicóptero empezó a ser una aeronave viable.
Así pues, Juan de la Cierva no solo creó el Autogiro, sino que al hacerlo desarrolló la primera teoría completa de las alas rotatorias y resolvió todos los problemas técnicos que se le presentaron.
La teoría de helicópteros actual sigue siendo una evolución de la de Juan de la Cierva, por lo que lo más apropiado es decir que Juan de la Cierva es el padre del Ala Rotatoria, y el creador de la mayor aportación que España haya hecho nunca a la aviación de todos los tiempos.
En Murcia también estuvo con su Autogiro haciendo una demostración ante sus paisanos. El día 3 de septiembre de 1930 aterrizó en Sangonera la Seca proveniente de la base aérea de Los Llanos (Albacete). No hay que imaginar mucho para hacerse a la idea de como fue recibido en tierras murcianas. Días después estuvo en los Alcázares y en la base de San Javier. En enero de 1934, volvió a pasear su Autogiro por San Javier y Cartagena, donde le impusieron la banda de Caballero de la Orden de la República, concedida por el Gobierno.
Por todo esto y otras cientas de razones, las cuales son difíciles de enumerar sin dejarse ninguna en el tintero, el Aeropuerto de Corvera ha de llamarse “Aeropuerto Internacional Juan de la Cierva”.
No solo como homenaje al mayor inventor de todos los tiempos en el mundo de la aeronáutica a nivel internacional, también como deber moral del pueblo de Murcia y la consecuente proyección internacional que podría conseguirse explotando la figura y obra de éste ilustre Murciano.
Tanto creando conferencias, convenciones anuales de Autogiros a nivel internacional, ilustrarlo con paneles explicativos de su vida y del proceso de creación de la “gran máquina” que creó: EL AUTOGIRO, exposición estática de una posible réplica del mismo...
Murcia y todos los murcianos se lo deben. Hoy martes se votará esta Propuesta impulsada por Ciudadanos, que cuenta con el apoyo del PP. Veremos cómo se retratan PSOE y Podemos, y si son o no capaces de entender que es un reconocimiento a un ingeniero ilustremente reconocido mundialmente, nacido allí.