Aviación Digital, Sp.- La iniciativa conocida como MOSAIC (Modernization of Special Airworthiness Certificates) está generando un revuelo significativo en la industria de la aviación ligera en Estados Unidos.
Esta propuesta busca modernizar y actualizar la normativa que regula las aeronaves deportivas ligeras (LSA), una legislación que vio la luz en el año 2004. Además de representar un esfuerzo por mejorar la regulación, MOSAIC ejemplifica una colaboración a largo plazo entre la Administración Federal de Aviación (FAA) y tres de las asociaciones más influyentes en este ámbito en EE. UU.: EAA (Experimental Aircraft Association), AOPA (Aircraft Owners and Pilots Association) y GAMA (General Aviation Manufacturers Association).
Desde hace un tiempo, estas tres asociaciones han estado trabajando en estrecha colaboración con la FAA para revisar y flexibilizar las restricciones operativas que afectan a las aeronaves deportivas ligeras (LSA). Su objetivo es relajar muchas de las limitaciones actuales, incluso permitiendo ciertas operaciones comerciales que hasta ahora estaban reservadas exclusivamente para aeronaves certificadas.
El plan de MOSAIC es organizar las aeronaves ligeras en tres categorías distintas: FAR 103, LSA y Legacy (aeronaves más avanzadas que están fuera de nuestro alcance).
La primera categoría incluye las aeronaves bajo la regulación FAR 103, que son principalmente aeronaves de tubo y tela, con un peso mínimo y, por lo general, diseñadas para un solo ocupante. Estas aeronaves son extremadamente simples y ligeras, y su manejo no requiere ningún título aeronáutico.
La segunda categoría es la actual LSA, pero con mejoras significativas. Entre los cambios más destacados se encuentra la eliminación de la restricción de peso máximo actual, reemplazándola por parámetros basados en la velocidad de pérdida, que se establecerá en 54 nudos con el avión limpio o con superficies hipersustentadoras fijas o automáticas, en lugar de los 45 nudos anteriores. Esto permitirá aeronaves más grandes, con un peso máximo de alrededor de 3.000 libras (aproximadamente 1.350 kg), lo que mejorará la seguridad, la durabilidad y el confort de las nuevas aeronaves certificadas bajo esta norma.
Además, MOSAIC aumentará la capacidad máxima de ocupantes a cuatro plazas, aunque cuando un piloto con certificación «LSA» esté al mando, solo podrá llevar a bordo a un pasajero.
Estos cambios brindarán a las escuelas de vuelo más opciones para renovar sus flotas, al hacer que los LSA más grandes y resistentes sean una elección viable para las operaciones de entrenamiento. Esto permitirá que aeronaves como la Cessna 172 o la Piper PA-28 entren en esta categoría.
Otro cambio importante es la eliminación de la restricción que obliga a las LSA a utilizar motores de combustible convencional, lo que abrirá la puerta a futuros desarrollos de propulsión eléctrica, híbrida, turbohélice, entre otros. Además, se ampliará la categoría para incluir helicópteros y aeronaves de despegue y aterrizaje vertical (VTOL) con propulsión eléctrica. Las normas de certificación se basarán en el estándar internacional ASTM, lo que facilitará la certificación de nuevas aeronaves en todo el mundo, dado que el estándar es de alcance global.
Otro cambio destacado es la revisión de la norma del 51% en la construcción de aeronaves por aficionados. Esta modificación permitirá que la aeronave sea construida por mecánicos profesionales, talleres especializados e incluso por el propio fabricante del kit, en cualquier porcentaje deseado, eliminando la restricción del 51% impuesta previamente.
En cuanto al certificado médico, se mantendrá la filosofía de que no se requiere un certificado médico aeronáutico separado, sino que se permitirá el uso del certificado médico del carné de conducir de automóvil.
En cuanto a las operaciones, MOSAIC permitirá usos comerciales como la fotografía aérea, la agricultura y la vigilancia de oleoductos, entre otros. Esto posibilitará que los fabricantes certifiquen sus LSA para operaciones comerciales, lo que requerirá una formación adicional para las tripulaciones, pero permitirá el uso de aeronaves mucho más económicas para dichos fines.
La colaboración previa entre la FAA y las principales asociaciones en la elaboración de MOSAIC ha resultado en una normativa bien pulida. Esto debería servir como ejemplo de cómo la colaboración entre asociaciones y autoridades puede llevar a una legislación más efectiva. España y Europa deberían considerar seguir el ejemplo de MOSAIC y revisar su legislación de aviación ligera para impulsar la evolución del sector.
En la actualidad, MOSAIC se encuentra en un proceso de audiencia pública que se extenderá durante aproximadamente 90 días, hasta mediados de octubre. Se espera que la normativa definitiva se establezca en 2024. Este es el momento adecuado para que España y Europa realicen un esfuerzo similar para reorganizar su legislación de aviación ligera y promover un desarrollo real en el sector.