5 de mayo de 2015.- Alexandra Pope, Social Media Comunity Coordinator, publica hoy en The Weather Network, un interesante artículo para todos aquellos que quieren saber cuando miran al cielo qué es exactamente lo que están viendo cuando miran hacia las nubes. En unas magníficas fotografías retratan esta «masa visible de gotitas líquidas y cristales de agua helada, que junto con las sustancias químicas se encuentran suspendidas en la atmósfera…» Para aquellos que no lo sepan (aunque muchos de nuestros lectores lidian a diario con ellas) las nubes se forman en la troposfera, es decir en la capa de la atmósfera más próxima a la superficie terrestre. Tambien en la troposfera, el aire contiene diminutas partículas de vapor de agua. Encontraremos además pequeñas partículas de polvo y sal, llamados aerosoles que constantemente chocan con el vapor de agua. Cuando el aire se enfría, el vapor de agua se acomula en los aerosoles, por el proceso llamado condensación. Poco a poco se van formando gotas de agua alrededor de los aerosoles y a éstas se adhieren otras, hasta que conforman la nube.
Hay muchas maneras por las que el aire finalmente se enfría y termina formando las nubes. Por esto es por lo que hay una gran variedad de tipos de nubes, de las que podemos disfrutar en el cielo, y por esto tambien el tiempo varía en función de esas nubes. Por su forma las nubes se pueden clasificar en cinco categorías básicas:
Cirriforme, estratiforme, estratocumuliforme, cumuliforme y cumulonimboforme.
El prefijo «alto» y «cirro» denota la altura a la que cada tipo de nube se forma. Los cúmulos aparecen «hinchados», mientras que los estratos aparecen planos y en capas. Nimbus o nimbo, son nubes que producen precipitaciones…
PARA ACCEDER AL ARTÍCULO COMPLETO de THE WEATHER NETWORK pincha AQUI. La foto que reproducimos arriba es la de la nueva nube, «undulatus asperatus» cuyo nombre fue propuesto por la Cloud Appreciation Society en 2009, y a la que le dedicamos un artículo en AD hace ya tiempo.