Eran las 15.38 horas del 2 de marzo de 1969 y se acaba de escribir la primera página en la historia de la aviación comercial supersónica.
El primer vuelo, descrito por el capitán André Turcat como «un viaje alrededor de la pista«, duró solo 29 minutos y no superó los 480 km/h. Junto con Turcat, la tripulación estaba compuesta por el mecánico de vuelo Michel Rétif, el ingeniero de vuelo Henri Perrier y el copiloto Jacques Guignard.