Claudia Celestes / Aviación Digital, Sp.- El Boeing T-7A Red Hawk ha alcanzado tres hitos recientes, impulsando hacia adelante el avanzado entrenador de pilotos para la Fuerza Aérea de los Estados Unidos.
.@Boeing T-7A Red Hawk triples progresshttps://t.co/Fk32F8JxyK pic.twitter.com/XzSGioHC11
— Fly High Aeromedia (@FHAeromedia) April 29, 2024
Pruebas en cámara climática
La aeronave T-7A APT-3, una de las cinco aeronaves de desarrollo de ingeniería y fabricación, se sometió a rigurosas pruebas en la Base de la Fuerza Aérea de Eglin, soportando temperaturas que oscilan entre los -25°F y los 110°F. Esta prueba evaluó el rendimiento del sistema de la aeronave, incluyendo propulsión, hidráulica, combustible, eléctrica, energía secundaria, control ambiental y operaciones generales en condiciones ambientales extremas. La aeronave ha regresado desde entonces a St. Louis para más pruebas.
Prueba del sistema de escape
Boeing y la Fuerza Aérea llevaron a cabo una prueba dinámica de trineo en febrero en la Base de la Fuerza Aérea de Holloman en Nuevo México. La prueba se centró en mejoras de diseño en el asiento eyectable ACES 5 de Collins Aerospace, una empresa de RTX, y en el sistema de fracturación de la cúpula de Pacific Scientific EMC para reducir el riesgo de lesiones. Durante la prueba, el equipo implementó un cronometraje variable para frenar el asiento eyectable, utilizando el paracaídas de arrastre e investigando los patrones del sistema de fracturación de la cúpula. El equipo se está preparando ahora para avanzar con la siguiente ronda de pruebas de desarrollo.
Boeing T-7A Red Hawk Triples Progress https://t.co/grFfqwWYf1
— Marcel van Leeuwen (@AviationNews_eu) April 29, 2024
Ley de control de vuelo
Boeing completó el desarrollo en febrero de una nueva ley de control de vuelo de software y desde entonces, ha volado la aeronave más de 10 veces, alcanzando un ángulo de ataque de 25 grados. Además, tres de esos vuelos demostraron la capacidad de la aeronave para lograr un seguimiento fino mientras se encuentra en un alto ángulo de ataque, una capacidad clave para el entrenamiento de pilotos. La incorporación de la ley de control 17.5 allana el camino para que la Fuerza Aérea comience las pruebas de resistencia a altos ángulos de ataque y de salida en la Base de la Fuerza Aérea de Edwards.
«El T-7A Red Hawk está preparado para revolucionar el entrenamiento de pilotos, ofreciendo seguridad, rendimiento y adaptabilidad mejorados, y completar estos tres hitos muestra un progreso significativo en el desarrollo del programa», dijo Evelyn Moore, vicepresidenta y gerente de programa de T-7. «Continuaremos con las pruebas de vuelo y la siguiente ronda de pruebas del sistema de escape a lo largo de este año y hasta 2025″.
Mientras el T-7A Red Hawk continúa progresando en las pruebas y completando vuelos, Boeing también está construyendo una nueva línea de producción para la producción inicial a baja tasa (LRIP) del T-7A. La compañía tiene previsto cargar los primeros fuselajes delanteros y traseros para la LRIP a mediados de año, ya que los proveedores ya están desarrollando piezas para la producción.