Aviación Digital, Sp.- El tráfico aéreo del aeropuerto de Eindhoven, Países Bajos, estuvo paralizado ayer 24 de febrero por la tarde y durante cuatro horas, por una amenaza de bomba en un avión de la compañía Transavia que procedía de la República Checa. Los 141 pasajeros y 6 miembros de la tripulación fueron desembarcados y atendidos por los servicios de emergencia.
Según fuentes del aeropuerto, esta amenaza afectó aproximadamente 8.000 personas, al verse obligados a desviar decenas de vuelos que llegaban a otros aeropuertos como Schiphol, Maastricht o Bruselas, donde los pasajeros fueron trasladados en autobús al aeropuerto de Eindhoven. En cuanto a los vuelos de llegada y salida tuvieron que ser retrasados y cancelados algunos de ellos.
El Servicio de Detección de Artefactos Explosivos de Defensa y un perro rastreador de Marechaussee, participaron en la búsqueda de algún artefacto en el interior de la aeronave y tanto el equipaje como los pasajeros también fueron revisados. La Royal Netherlands Marechaussee ha abierto una investigando al respecto, pero por el momento ninguna persona ha sido arrestada en relación a la amenaza de bomba.
Horas después, el trafico aéreo ha sido abierto sin observarse incidencia alguna.