Aviación Digital, Sp. – El presidente de CNAF, ZHOU Qiang, en compañía de otros representantes de la empresa estatal china, así como de delegados de Airbus y Airbus China, realizaron una visita a las instalaciones del Parque Energético La Rábida de Cepsa con el fin de mostrar su interés por las unidades de producción pioneras en España de combustible sostenible para aviación (SAF). Durante esta visita, estuvieron acompañados por Jorge Acitores, Antonio Joyanes, Javier Antúnez, Álvaro Macarro y Tobi Pardo, quienes son responsables de Energy Parks, Biocombustibles y Aviación de Cepsa.
El combustible sostenible para aviación, que se produce a partir de residuos de origen vegetal, reduce las emisiones de dióxido de carbono (CO2) hasta en un 90% a lo largo de su ciclo de vida. Desde marzo de este año, Cepsa ha comenzado a producir este tipo de combustibles en el Parque Energético La Rábida. Además, tiene en su agenda la construcción de una nueva planta con una inversión de 1.000 millones de euros que producirá este queroseno sostenible a partir de materias primas como el aceite de cocina usado o residuos vegetales. Se trata de la mayor planta de biocombustibles de segunda generación del sur de Europa, y podrá producir de manera flexible quinientas mil toneladas anuales de SAF y diésel sostenible a partir de residuos orgánicos.
CNAF, empresa estatal de China, es la mayor proveedora de combustible de aviación del país. Cubre 246 aeropuertos comerciales en China, donde tiene sus propias instalaciones de suministro de combustible, y extiende el mercado a 54 aeropuertos más fuera del país asiático. CNAF da servicio a más de 560 aerolíneas en todo el mundo. Su interés por el combustible sostenible para aviación la ha llevado a interesarse, junto con Airbus, por la producción que Cepsa hace en sus instalaciones del Parque Energético La Rábida.
Airbus está establecida en China desde 1994. Desde entonces, el crecimiento de la constructora aeronáutica europea en el país ha sido exponencial, ampliando de manera notable el número de aviones comerciales vendidos en las dos últimas décadas.
Esta visita supone un primer paso para una posible colaboración futura. Durante la misma, los representantes de Cepsa se han mostrado muy satisfechos por la repercusión que los trabajos realizados en Huelva está teniendo en el mundo de la aviación sostenible.